Aurora.

Al llegar a mi casa sigo meditando si lo que hice fue lo correcto pero no se me ocurría otra cosa y dudo más por el rostro de Dante, se miraba demasiado feliz algo de eso no me convence pero prefiero mil veces un matrimonio por conveniencia que casarme con ese mal nacido además es perfecto para darle donde más le duela a Rebeca ya que está interesada en él y no me preocupo por cumplir mis deberes matrimoniales conozco el secreto de ese hombre, subo las escalera de mi casa para llegar a mi habitación y descansar un poco pero me encuentra una sirvienta.

-Disculpe señorita pero el marques la esta esperando en su habitación desde ase dos horas y ahora esta en la sala posterior.

Ya no me importa que me espere todo el día además ya me imagino quien lo debe de estar entreteniendo y como me lo pensaba al llegar al pasillo de mi habitación me encuentro con Rebeca que viene presumiendo que le darán joyas nuevas pero al verme cambia a una sonrisa falsa.

-Hermanita ¿ Donde estabas ? El marques tiene mucho tiempo esperando pero no te preocupes el tuvo buena compañía.

Sin vergüenza como te atreves a restregarme lo en la cara, le doy una sonrisa para no demostrar mi molestia.

-Te lo agradezco mucho hermana por entretener a mi prometido pero debes de tener cuidado una mujer soltera no debe de estar a solas con un hombre se puede mal interpretar y tu reputación salir afectada.

Me doy cuenta que Rebeca se pone nerviosa pero se esfuerza por darme una sonrisa.

-Eso es imposible, él es como de la familia además es él único que comprende mi talento.

Rebeca mira a su sirvienta con una sonrisa burlona, maldita mosca muerta ya veras como te borro esa sonrisa del rostro solo dame tiempo pero se como la puedo hacer enojar.

-Es extraño ya que antes no lograbas memorizar las canciones ni mucho menos el tono asi de que talento hablas aunque si me sorprende que ahora puedas cantar sin equivocarte.

Miro con sadisfaccion como se le borra la sonrisa del rostro y antes de que me responda le paso por un lado más feliz conmigo misma por darle lo que se merece.

-Hermanita debes de estar cansada deberías de descansar en tu sillón y revisar tu vestidor.

No le digo nada más y entro a mi habitación en la que todo se ve normal pero al ver el sillón con detenimiento me doy cuenta que hay cabellos castaños y rubio oscuro en él es más que obvio que ese cabello no es mio es de esa mosca muerta tendré que cambiar el sillón, después de cambiarme bajo las escaleras para encontrarme con ese traidor lo encuentro muy entretenido con los alaridos de Rebeca, que no se cansa de estar a su lado, Rafael se da cuenta de mi presencia y se levanta del sillón.

-Mi querida prometida te estuve esperando mucho tiempo.

Ni creo que dejaron pasar lo que hicieron, les muestro el cabello con una sonrisa.

-Al parecer Rebeca tiene un amante y es extraño que el cabello tenga el mismo tono que el suyo marques ¿ Tal ves estuvo en mi armario ?

Me doy cuenta que los dos se poner nerviosos pero Rafael me da una sonrisa forzada.

-Si estuve allí por que te quiero renovar todo el guarda ropa, hay algunos vestidos que ya no se volverán a usar y como mi prometida no puedo permitir que eso pase.

Pero me quiere ver la cara tonta o cree que soy estúpida pero por lo pronto se lo dejaré pasar y le are creer que le creo, me acerco a él y le tomo las manos con una gran sonrisa.

-Muchas gracias que hombre tan atento tengo como prometido.

El mayordomo se nos acerca y con una referencia nos informa que el joyero a llegado y nos esta esperando en la recepción, me doy cuenta que Rafael se pone tenso y por las palabras de Rebeca se que no viene por mi pero decido jugar con estos dos.

-Voy a ir a recibirlo por que mi prometido lo a mandado a llamar por que me quiere comprar algo.

Le doy una sonrisa a Rafael que solo asiente torpemente pero por el rabillo del ojo puedo ver la cara de molestia de Rebeca, pasamos a la recepción donde el joyero nos muestra lo que pidió mi disque prometido que es un collar, aretes y un brazalete con piedras de color azul, el joyero me los muestra y me dice que incluso el marques mando a grabar mis iniciales en ella y al verlas me doy cuenta que no son las mías si no las de mi hermana, pero que sin vergüenza y que idiota el joyero que no se da cuenta de su error pero debo de mantener la fachada, volteo a ver a Rafael con una gran sonrisa.

-Muchas gracias marques es un hombre de verdad considerado y explendido por comprarme esto a mí.

-Claro que son para ti.

Ya veremos como quedas después de esto, comienzo a mirara las demás joyas de que están sobre la mesa y con labia hago que Rafael las compre, a gastado una fortuna en una sola hora pero lo que más me gusta fue ver la cara de rabia de Rebeca cuando se levanto del sillón y salió de la habitación, después de hacer que Rafael me comprara todas esta joyas debo de pensar que hacer con ellas no quiero usar nada que me de ese desgraciado, llamo al mayordomo y le pido que venda todas las joyas pero que nadie se dé cuenta y con el dinero busquemos un buen genio de información.