— ¿Acaso piensas huir con mi hijo?— preguntó Lucas.

— ¿Huir, no?— respondió Alyssa— solo que es un contrato con fecha de vencimiento, es natural que me embarace de ti.

— Al separarnos, si, debería ser contigo con quién viva el niño y yo, lo tía a visitar— dijo Lucas— aunque no entiendo para qué hablamos de eso.

— Porque es bueno establecer las normas desde ahora, recuerda que éste matrimonio no es normal— dijo Alyssa.

— No creo que lo olvide,— dijo Lucas— tu me lo recuerdas a cada instante.

— Lucas, necesito saber— dijo Alyssa— para estar claros, no me gustaría pelear por un niño.

— ¡Tranquila tu y yo no pelearemos por eso!— dijo Lucas Harper.

Esa noche antes de dormir, Alyssa le pidió a Lucas que le ayudara a desenredar sus largos cabellos, él empezó a hacerlo y luego le dijo:

— ¿Tu objetivo con esta ayuda es ponerme caliente para estar contigo?— dijo Lucas divertido.

— ¡No! ¿Por qué dices eso?— dijo Alyssa avergonzada? ¡Dame mi peine por favor!

— No, es demasiado sensual tener tu he