La tomó en sus brazos y la llevó de regreso a la habitación, le ayudó a escoger una pijamada de princesas, es la favorita de Ámbar, cuando se cambió, la ayuda a que se acueste, la arropa y regresó al baño con la pijama, tenía que quitarse el boxer mojado.

Quince minutos después regresó con un boxer seco y un pijama puesto, al llegar ella estira su mano hacia él, él la tomó sin preguntar, se acostó a su lado, la abraza dándole muchos besos en su carita, después la acomodo sobre su pecho, le acaricia el cabello hasta que se quedó dormida.

Él la mira observando su rostro, la ve tranquila, nota que su sueño es ligero y su rostro es hermoso, la acaricia su mejilla, hasta que se quedó dormido.

Samuel bailó hasta que Su esposa se cansó, la tomó en sus brazos y la llevó a su habitación, igual que Sandro, ya sabía cuál era la habitación que su madre le había asignado.

La dejo en la cama, quince minutos después regresó en su búsqueda, ella se estaba quejando dormida, muy sutil le quitó las zapa