Ximena se dio cuenta de que Mariana no quería volver a ese lugar en absoluto. Cada rincón estaba impregnado con recuerdos de ella y Diego, cada detalle era como una punzada en el corazón.
—Mari, ve a Residencial Bosque Dorado, a la casa donde vivía antes, —sugirió Ximena.
Mariana negó con la cabeza,