Capítulo 33 El mejor regalo para Abigail es…
Al día siguiente Zacarías estaba en su oficina, era un día atareado y Santiago interrumpía por tercera vez— ¿Ahora qué quieres? —le dijo molesto
— ¡Tenemos otra situación que requiere su intervención! ¡No sé si le interesara!
— ¿Qué sucede?, y déjate de tonterías! ¡No tengo humor para adivinanzas!
—Hoy en el cumpleaños de la señorita Abigaíl
— ¿El cumpleaños?
—Si
— ¿Cómo lo sabes?
—La cosa es así, le iba a transferir el salario que me ordeno depositarle mensualmente, y me tope con su documento de identidad—Santiago vio como Zacarías se quedaba pensativo, parecía interesado en la información qe le proporciono y espero su respuesta
—Llama a la abuela y se lo dices—le ordeno—se vería mal que yo celebre algo tan íntimo
— ¿Usted cree? ¡Yo no lo creo así! —hoy Santiago se sentía de buen humor y su romanticismo salió a flote
— ¿Por qué lo crees?
—Ustedes tienen un hijo en común, a usted le interesa que la señorita esté lo más feliz posib