Capítulo 30.

Megan.

Decir que había dormida algo sería un eufemismo. Por la tarde, después de nuestra reunión con el señor Boslo en el complejo, todos los chicos que estábamos en la playa le preparamos algo de comida a la nueva participante solo para encontrarnos con una completa snob que se presentó como la “nueva Angelina” y enseguida comenzó a hablar de ella como un pequeño loro. Se veía a tres kilómetros de distancia que esta chica era una niña rica y consentida; rechazó con asco nuestra comida y se la pasó quejándose sobre su piel quemada y las horribles condiciones en las que tendría que dormir cuando miró nuestro refugio.

Las otras chicas automáticamente se lavaron las manos sobre ella y la ignoraron monumentalmente; yo, desgraciadamente, tenía otro tipo de educación y traté de ser cortés… pero hasta yo tenía mis límites. La chica era, en una palabra, insoportable.

Justo después de que nos arrojara el pescado cocido que el ofrecimos, se adueñó del colchón y del refugio. Cuando anocheció de
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App