Capítulo 28.
Narra Daimon.
Ella tira de mi cabello y eso provoca que me excite mucho más de lo que estoy.
La beso y me adentro despacio en ella, me adueñó de su cuerpo y lo beso para calmar su dolor.
Me muevo despacio para que se acostumbre, soy el primer hombre en su vida y me siento dichoso de serlo.
—¡Daimon!
—Tranquila amor ya pasara—.
—Solo bésame por favor—. La beso con pasión y anhelo.
Sigo moviendo mis caderas, así entregándonos en esta lujuria y pasión que nos envuelve, sus gemidos y mis gruñidos resonaban en la habitación.
Con esta entrega el pacto Govea estaba sellado y saldado, pero aún así no voy a dejarla, ella es mía, veré la forma como la llevo al inframundo.
Terminamos exhausto, agitados, y sudorosos. —Te amo Emily Jeane Govea, eres todo lo que yo quiero en mi existencia—.
—Yo te amo más Daimon, espero y te quedes a mi lado siempre—.
—Siempre estaré a tu lado mi amor—. La beso con devoción y anhelo de seguir perdiéndome en su piel.
Ella parece leer mis pensamientos y sube sobre m