—Está embarazada—dijo Dafne.— creo que tiene tres o cuatro meses.
El doctor asintió y se llevó a Aurora al área de emergencia. Theo miró a la enfermera que le había negado a Aurora la atención inmediata y frunció el ceño.
—Disfruta de la corta vida que te queda—le susurró.
—Theo…—dijo Dafne antes de empujarlo hacia la sala de emergencias.
Theo junto a Dafne tuvieron que esperar por unos largos minutos que se convirtieron en horas hasta que finalmente pudieron entrar a ver a Aurora.
El doctor había sido muy claro con sus indicaciones. Ella estaba muy débil, sus defensas estaban muy bajas y por la falta de descanso y por su mala alimentación tenía una gran anemia. Anemia que se podría convertir en cancer si ella no se cuidaba.
Theo estaba preocupado, a&uacu