Jun vio como Brendan se alejaba para así asistir a su última reunión de esa tarde. Su cuerpo se sentía pesado y sabía que lo más probable era que había contraído algún resfriado.
Entró a su oficina y terminó el trabajo del día—luego se dirigió a casa donde lo esperaba Kayden. Se sentía un poco extraño tener una persona esperando en casa, pero al mismo tiempo el sentimiento no era malo.
Kayden estaba frente a su computador en una reunión con su director de baile, así que lo saludó silenciosamente y su amigo señaló a la cocina.
Al entrar pudo ver que le había preparado la cena, de la cual comió muy poco, ya que no tenía mucho apetito y su estómago se quejaba.
Se dirigió nuevamente a la sala y se sentó lentamente en el sofá. Acomodó su cabeza en el respaldo, y miró al techo mientras esperaba que su amigo terminara—soltó un suspiro, y cerró los ojos con la esperanza de que sus tumultuosos pensamientos se calmaran. Habían pasado demasiadas cosas en tan poco tiempo y no sabía como manejarla