Respira. Respira.
Joder, odio las tormentas.
"¿Kit?" preguntó Sera en voz baja.
Me lo sacudí, fingiendo que estaba bien mientras la miraba por encima del hombro. "¿Sí?"
"¿Estás... estás bien?". Sus ojos azules brillaron con preocupación, haciendo que mi corazón casi diera un vuelco.
"Sí, estoy bie