— Gabriel. — susurro molesta Cielo y Azazel trino los dientes.
— No tenía porque sonreírte. — se quejó comenzando a caminar.
— Pues me alegro de que lo hiciera, no reacciono bien cuando alguien me ve con seriedad mientras carga un arma. — y fue allí donde Azazel se detuvo, la vio por un segundo y lu