Mientras tanto, en el grupo Lamber, Helena ya había terminado de tratar con James su tío, acababan de firmar y James estaba realmente satisfecho con los arreglos del trato.

Como James estaba contento, invito halagadoramente: “Helena, ya es medio día, me pregunto si me aceptarías la invitación para que almorcemos juntos”.

Levantando la mirada, Helena se negó de inmediato: “lo siento tío, tengo algunos asuntos que hacer aun, además, aun no es el momento adecuado para demostrar que tenemos un acuerdo mutuo, o ya se olvidó los arreglos que mencione que debe cumplir para que siga en esta posición”.

James abrió mucho los ojos y se golpeo suavemente ligeramente la cabeza, posteriormente dijo: “lo siento sobrina, acabo de decir estupideces, es solo que pensé en como agradecerte, no culpes a este viejo tonto”.

Helena lo miro con los ojos en blanco y dijo: “no pasa nada tío, siempre y cuando lo recuerdes todo estará bien”. Después de una pausa, ella continuo: “entonces, ahora que todo esta echo