—Bien, te llamaré después de aterrizar.
De repente, Mariana escuchó una voz familiar.
Al abrir los ojos, vio a Walter colgando la llamada.
Mariana pensó: Qué pequeño era el mundo.
Walter no parecía sorprendido de verla.
Después de todo, este era el vuelo más próximo de regreso al país.
Yahir tosió ligeramente y miró por la ventana.
Yahir tosió ligeramente y miró por la ventana.
—Señorita Chávez —Simón asintió levemente en señal de saludo.
Mariana bajó la mirada: —Hmm.
Los cuatro se quedaron en silencio.
Afuera aún estaba oscuro. Mariana se giró, alejándose de Walter.
El avión despegó y Mariana se preparó para dormir. Sin embargo, Walter y Simón seguían organizando el trabajo, lo que la ponía cada vez más molesta.
—Está muy ruidoso —Mariana cerró los ojos, sin mirarlos, simplemente expresando su frustración.
Simón levantó la vista y rápidamente dijo: —Lo siento.
Walter miró a Mariana, alzó una ceja y siguió hablando de trabajo sin bajar el volumen.
—Cancela este proyecto de inmediato. A