----PUNTO DE VISTA [Narrador]----

El príncipe Harris está furioso por el ridículo que hizo ayer. Sabe que, si ese rumor llega a su madre, nuevamente será castigado, aunque no haya prueba alguna de eso. Además, con eso, Alphonse ha generado lastima, hasta podría decir que volvió a caer bien.

— Ese bastardo maldito —murmuro golpeando el vaso que estaba sobre la barra.

— Pareces enojado —la voz de esa mujer es algo que le molesta demasiado.

— ¿Quién mierda te dejó pasar, Diana? —Preguntó el príncipe Harris sin voltearla a ver.

— Ayer estuve en aquel lugar… realmente no esperaba que tu prometida estuviera casada, esperaba todo menos eso. ¿No tienen hijos?

— No, ni siquiera sé si sí están casados o solo es un contrato. Ese bastardo esconde las cosas bien.

— ¿Ya hablaste con ella? Explicándole todo lo que pasa.

— Ya lo hice y no me cree absolutamente nada. Pensó que era una clase de broma molesta. Me vieron como un payaso ella y aquel sirviente o amante, no sé quien mierda es.

— Te ayudaré