Dorian ..Había vuelto a mi rutina del trabajo con la diferencia de que tenia a Anais a mi lado, procuraba terminar lo más pronto posible con mi trabajo y poder ir a casa para verla, la extrañaba durante todo el día. ¿Me esperaba esta noticia del embarazo? Si, claro que lo esperaba, no me he cuidado, ella supongo que si lo hacía, pero me tomé la tarea muy enserió y ahora estamos a la espera de nuestro primer hijo, me tiene muy emocionado. Cada hora, cada día, cada año ha valido la pena, mi hijo tendrá todo, yo tengo a la mujer que amo, mi nena bella, seré el mejor hombre para ellos. —Imagina que saque tus ojos, me volveré loco —susurro, nos encontramos acostados, su cabeza reposa sobre mi brazo, con mi mano libre acarició su vientre plano. —¿Y si tiene los tuyos? —inquirió. —También me volveré loco, el o ella hará que yo cumpla cada uno de sus deseos —ella soltó una risita. —Dori… así no deben ser las cosas, si esta bien que los consientas algunas veces pero no siempre… —No cr
Rocio —Relájate solo estamos hablando —dijo su madre con su mirada fija en el. —Ponte de pie, nos vamos ahora mismo —me ordenó el, no sabía las razones pero me sentía muy confundida, era invadida por emociones desconocidas para mi. Xavier miraba a su madre como un león a punto de atacar si la situación lo requiere, al parecer desconozco algo sucedido entre ellos, hice lo que me pidió y tomó mi mano con firmeza, se coloco frente a mí aun sosteniendo mi mano, no pude apartar mi mirada de el —Si la vuelves a buscar pondré una denuncia en tu contra, aléjate de ellos y aléjate de mi, no me interesa estar cerca de ti. —Soy tu madre Xavier, no me puedes pedir eso, lo hago por tu bien, no me hables así en público —pidió ella. —Ya no estoy bajo tu dominio, yo decido lo que es mejor para mi, estas advertida —se giró hacia mi, me miró con preocupación —Vamos —dijo y me llevó con el a la salida. Me ayudó a subir al auto de mi boca no salía palabra alguna, por primera vez en mi vida sentía que
Meredith ...¿Había escuchado bien? Creo que no, necesitaba que me repitiera eso, no podía ser posible, Ryker mantenía la seriedad en su rostro, su mano aun mantenía sujeto mi mentón, me aleje de su toque, me levante y me quede parada frente a el, sus ojos no se apartaron de los míos en ningún momento. —¿Qué dijiste? —pregunté. —Que es mi prometida —respondió tranquilo, opto por una pose relajada, mierda que guapo se veía ¿Cómo podía hacerme esto? Una de sus manos fue a su barbilla acarició sus labios con su dedo índice, mientras me observaba detalladamente. Mi vista bajo a su pecho donde su camisa estaba abierta mostrándome parte de su pecho, seguí bajando hasta llegar a su entrepierna, su pantalón abierto y se marcaba muy bien su miembro. Con la vista a los ojos Meredith… míralo a los ojos, que en sus malditos ojos grises es donde podrás ver si te miente —me repetía mentalmente, el problema era que sus ojos no mostraban nada solo ese maravilloso gris tormentoso que ocasiona un
Si crees que amarte es un pecado entonces yo abrazare mi condena con una sonrisa. No temeré a las llamas del infierno, cada chispa ardiente de ese fuego sobre mi piel será un recordatorio de lo mucho que te adoro. Preferiré mil veces arder en el fuego eterno, vivir en ese lago de fuego para siempre será un placer, cada agonía, cada quemadura valdrá la pena si me dejas amarte como quiero. Mi amor por ti es tan profundo y feroz que ni el infierno podrá apagarlo. Ven decide vivir este amor junto a mi, toma mi mano yo recibiré cada quemadura por ti, permiteme amarte como mereces. Que los demonios me esperen, por que mi amor por ti es un fuego que arde, mucho más que cualquier infierno. Mi amor solo tu podrías apagar este fuego. Déjame adorarte toda una vida... *********************************************** Capítulo 1 —Lo amo Caminar por este jardín era como ir a pasear en un parque, admiraba la belleza de cada flor. Sonreí observando el cielo que este día lucia hermoso, su colo
Capítulo 2 —Viaje Anais Un año ha pasado desde nuestra boda, todo va bien entre nosotros, al menos eso es lo que yo creo, ya que a veces tenemos pequeños desacuerdos. Xavier y yo decidimos vivir en una pequeña casa, nos mudamos hace algunos meses ya que ahorramos el dinero necesario para poder comprarla. La familia de Xavier es muy adinerada pero no quise que el comprara nuestra casa, no estoy con el por su dinero y no es eso lo que quiero aparentar, se que su madre no me quiere por que piensa que yo estoy con el por su dinero. Los padres de Xavier tienen un empresa aquí en Estados Unidos y una en Francia. Su padre se hace cargo de la de Francia y Xavier de la que está aquí. Desde que salí de la universidad trabajo en una tienda de ropa. Xavier me ha ofrecido trabajo en su empresa pero no he aceptado, no quiero ver a mi suegra reclamar que yo esté metida en su empresa. Este día me toco cenar a mi sola. Xavier dijo que tenía una reunión y vendría muy tarde y mi hermana
Anais A la mañana siguiente, desperté un poco cansada y me dirigí a la cocina, mi hermana ya se encontraba ahí. Xavier había salido muy temprano ya que dijo que tendría una reunión. —¿Hoy no trabajas? —preguntó ella. —No, tengo que ir a mi chequeo de rutina —tome una taza y me serví un poco de café —Despertaste muy temprano —mencione pues ya había preparado café y estaba terminando de desayunar. —Si, sentí un poco de hambre y bueno… decidí prepararme algo. —¿Cómo te va en la universidad? —pregunté. —Bien, no puedo decir que soy la mejor pero me esfuerzo —se levanto y llevo sus platos a lavar, me hice unas tostadas. —Me alegra mucho escuchar eso, lo importante es que te esfuerzas mucho —ella sonrió. —Gracias, creo que no vendré a dormir, Moni y yo debemos entregar un proyecto muy pronto y me quedaré a dormir con ella —note que no me dirigió la mirada. —¿Segura es eso? Te noto un poco extraña ¿acaso estas saliendo con alguien? Recuerda que… —¿Qué? Lo que mi mad
Anais Al llegar a casa comencé a empacar todo en las maletas, llame muchas veces a Rocio pero no atendió ninguna de mis llamadas, decidí enviar un mensaje. Xavier llego un par de horas después, se cambió de ropa, reviso que todo estuviera lista para irnos. —Trate de comunicarme con Rocio pero no respondió mis llamadas, así que le deje un mensaje —le informe. —Me parece bien, creí que querrías llevarla con nosotros —mencionó. —Ella está estudiando, no puedo interrumpir sus estudios, aunque supongo que le gustaría viajar. —Si ella quiere viajar el Jet estará disponible para el día que quiera ir, además creo que te sentirás mejor con ella junto a ti —comentó, agradecía que el tomará en cuenta a mi hermana pero será mejor que se quede para estudiar. —Eso no será necesario Xavier, ella sabrá entender que viajamos solo por una emergencia. —Está bien cariño, pero si quieres tenerla cerca a solo debes de decírmelo —se acercó a mí y acarició mi mejilla —Es hora de irnos —sujeto
Anais Bajamos a desayunar un poco tarde su madre nos dirigía una mirada reprobatoria a la que ni Xavier ni yo pusimos atención, si yo estaba en este lugar es porque es mi deber como esposa. Después de desayunar mi esposo se marchó junto a su madre y ver a su padre, su madre dijo que tenían que hablar cosas muy importantes sobre la empresa. Meredith me acompaña durante el resto del día, me pregunta por mi hermana ya que ellas compartieron un poco durante la boda. —¿Aún no has visto a papá? —me pregunto.—No, Xavier me dijo que lo vería esta tarde. Tu madre dice que se la pasa dormido la mayor parte del tiempo —ella negó.—Mi papá si necesita reposo, pero el no quiere permanecer en esa cama, si hay días en los que esta cansado y duerme la gran parte del día pero también hay días mejores para el, a veces sale a caminar por el jardín y respirar aire fresco —informa —se que le agradará verte, si quieres te llevo con el —se ofreció.—Oh no, no te preocupes iré con Xavier, estaremos mucho