Mirabelle pidió ser discípula de James únicamente por el Camino del Caos. Era una humana del Primer Universo y una de las primeras en existir. Como había experimentado todo lo que existía, solo lo desconocido y misterioso del Caos podía despertar su interés.

"Maestro, ¿puede contarme más cosas sobre el Camino del Caos?".

Mirabelle miró a James con anticipación. En ese momento, su adorable expresión no se parecía a la de una figura poderosa.

"Uhm...".

James estaba perdido.

"Aunque ahora seas mi discípula, no sé mucho de ti. La secta me prohíbe enseñar el Camino del Caos con facilidad. Cuando sepa más de ti, te enseñaré el Camino del Caos".

James comenzó a engañarla. Eso era porque no sabía qué explicarle. Solo había llegado a este nivel gracias a la guía de Yukia, y solo había adquirido tal fuerza absorbiendo el Núcleo del Macrocosmos.

Al oír esto, Mirabelle se sintió un poco decepcionada. Sin embargo, no indagó más. Como James era ahora su maestro, tendría muchas oportunidades d