Al ver que se estaba haciendo tarde, Heather no pudo evitar decirle en voz baja a Ambrose: “Hermano Ambrose, probablemente debería ir a descansar un poco ahora. Ha pasado bastante tiempo, y puede que el bebé se haya despertado”.

Heather había cuidado del bebé durante los últimos días, por lo tanto había desarrollado un profundo afecto por él. Sin embargo, era fácil que se sintiera algo vacía sin el bebé a su lado.

Al ver su cara, Ambrose se rio entre dientes. “De acuerdo, yo también iré a descansar. Vayamos juntos”.

Mientras hablaba, Ambrose se levantó para decirle a Chester y al resto con tono de disculpa: “Tío Zhu Bajie, Tío Chester, por favor, siéntanse libres de continuar. Ya he bebido bastante, así que regresaré a descansar”.

Mientras hablaba, agarró con fuerza la mano de Heather entre las suyas.

A pesar de pasar todos los días juntos y ser prácticamente inseparables, aún no era suficiente para Ambrose.

Después de que Ambrose hablara, Zhu Bajie sacudió vigorosamente su cabez