hola cuñado

Cap. 04

CEO del prometido de mi hermana

gisele

Al día siguiente, Karina ni siquiera dio más explicaciones sobre haber engañado a su prometido, y solo me habló normalmente y me dijo que si seguía siendo amable con ella, pronto me ayudaría a conseguir un trabajo.

Traté de no preocuparme por mi mala conciencia, y después del desayuno fui a ayudar a mi abuela Eugênia, porque por lo que entendí, su situación financiera no es la que era, porque había más empleados, y ahora solo hay uno. se fue, y la casa es muy grande y hay tantas cosas que hacer, y aparentemente Karina no hace nada y su madre tampoco, pero no puedo decir nada después de todo Karina trabaja afuera, y su madre parece un poco enfermo, porque casi nunca salgo de la habitación, mi padre pasa el día en la oficina, en la parte alta de la casa, y el abuelo ayuda a mi abuela en las compras, y en el jardín.

Realmente no es como mamá solía decirme, pero es incluso mejor que nuestra realidad en Brasil.

Pasé el día ocupado con la limpieza, y escuchando los cuentos largos de mi abuela, ella inicialmente estaba muy triste de verme haciendo las tareas del hogar, pero pronto insistí en que era lindo estar ocupado con algo, y así podíamos compartir momentos juntos, en el almuerzo la ayudé en lo que pude, a pesar de no saber nada de cocina griega, pero pronto ella insistió en enseñarme a hacer Spanokopita, una pasta rellena de espinacas, y Moussaka, que parece una lasaña a base de berenjena y carne, y también con una generosa capa de pasta de garbanzos en textura de puré de patata, y por último la ensalada griega, y de postre yogur fresco con miel.

Estoy muy emocionada, porque me encanta cocinar, e incluso comencé a trabajar en un pequeño restaurante en la carretera cerca de la finca de mi familia en Brasil, pero definitivamente no tengo palabras para comparar el arte de la cocina de mi abuela, porque a pesar de su edad, ella hace todo con una ejecución increíble y la delicadeza de la vajilla que según ella es de su boda, todavía me da pena usarla por lo delicada que es.

La ayudé a armar la hermosa mesa para el almuerzo, y pronto la familia se reunió y la abuela insistió en hablarme de mis habilidades, y me elogió por querer aprender sus recetas, ya que Karina nunca entró a la cocina, realmente no estaba en absoluto sorprendido por esta revelación.

Mi madrastra Hélia solo me miró y sonrió cortésmente, pero antes de eso dejó escapar un comentario ácido.

— No es por nada, hay una gran diferencia entre sus dos nietas, Karina tiene una cuna, ¡Gisele en realidad venía de la clase sirvienta!

— Lo siento hija, Helia no fue su intención ofender. "Habla mi padre".

— Sí, lo siento mucho, Gisele, pero no puedo permitir que mi suegra hable mal de mi princesa, y Eugenia sabe que Karina tal vez ni vaya a la cocina a lavar un plato, pero si no fuera así. Si no fuera por ella, todos estaríamos Dios sabe dónde, incluso el hecho de que viniera aquí fue obra suya, ¡después de todo, fue Karina quien pagó su boleto!

— ¡Al llegar a ser esposa, Gisele no necesita saber que ya no somos ricos!

"Hable con su hija, Xavier, sobre esto pronto, porque ella debe entender que estamos arruinados, ¡y luego tal vez atrape al otro heredero de Klosks!"

— ¡Basta nuera, cállate y escucha a tu marido!

Mi abuelo Palis, acaba de salir corriendo, y poco después de que Helia se levanta de la mesa, y papá va tras ella, me alegro de que el almuerzo ya haya terminado, y traté de no hacer preguntas, porque no quería echarle leña al fuego. el fuego, así que terminé limpiando todo el desorden del almuerzo y mis abuelos se acostaron un rato, la mucama estaba limpiando las habitaciones, y le pedí que me dejara cuidar mi habitación yo misma, y ​​si ella quiere ayudar ella me podía enseñar, terminé haciéndolo en los días siguientes limpiando en todos los comandos de la casa junto con ella.

Dafne es una mujer de unos treinta años, y para mi sorpresa era de Brasil, y trabajaba en la casa no todos los días, de hecho solo dos veces por semana, y me dijo que trabaja todos los días en otras residencias, y todavía trabaja. en un buffet.

Estuve muy tentado de aceptar ir a ayudarla en el buffet, ya que la tarifa diaria es una buena relación calidad-precio, y acepté ir tan pronto como hubiera una vacante.

Mis días transcurrieron sin problemas, a pesar de la cena semanal con la visita del prometido de Karina, y una vez más, me sorprendió por completo lo guapo que es.

El otro chico, Gael, apareció, pero como imaginé que estaban juntos, Karina lo estaba besando a escondidas en el jardín, justo después de que su prometido se fue, y yo la estaba cubriendo nuevamente.

Bueno, ella me dijo que me callara y esperara en el jardín mientras entraban un poco más, y terminé yendo a mirar.

Hasta quise decir algo, pero quien soy yo para decir o regañar a alguien, ya que nunca he tenido novio, porque no quería pasar por una mujer fácil, en mi ciudad, es mi madre Joana me hizo Entiendo que las relaciones eran muy complicadas y que una aventura no valía la pena, pero a mí tampoco me gustaba ningún chico y era fácil ir por ese camino.

Minutos después volvió Karina y entramos, me invitó a pasaral día siguiente cené con unos amigos suyos, y así fue.

Karina me prestó un vestido, y zapatos, y me dio toques de maquillaje, de pronto me miró con cara extraña, y comentó.

— Sabes, hermanita, eres muy linda, pero no te dejes llevar, ¡está bien, yo soy más!

"Sí eres preciosa.

Traté de halagarla, porque realmente creo que es hermosa y elegante, pero tuvo que prestarme un par de zapatos de tacón bajo, porque no sé caminar con tacones, por lo que Karina se rió mucho de la situación.

— Eres muy sencilla, querida hermana, pero qué lástima, porque creo que tendré que revisar el trabajo que pensé que sería adecuado para ti, ¡ya que ni caminas con tacones!

— No te preocupes Karina, casi voy a conseguir un trabajo, ¡y será genial porque sé exactamente qué hacer!

— ¡Ah!... Me he enterado, mi madre ya me ha dicho que te gusta ser sirvienta, ¡pero qué vergüenza, Gisele!

- ¿Crees?

Honestamente, mi hermana es una idiota, y estoy impresionado de que ella piense que hacer las tareas del hogar es vergonzoso, y su comportamiento de mujer ociosa no lo es.

— Escucha Gisele, sé que entendiste que ya no somos ricos, ¡pero nuestra familia tiene un lugar de nacimiento y nuestro apellido abre puertas!

— Sí, está bien, pero no usaré el apellido Floros, todavía no lo tengo.

— Basta hermanita, dejemos esta conversación para otro momento, porque mis amigas Dahlia y Jade ya deben estar en el restaurante, y por favor no hables de las tareas del hogar, déjame hablar con ellas.

- Está bien.

De repente, estaba muy aprensivo, el lugar era muy elegante y las amigas de Karina eran como ella, todas elegantes, pero justo después de las presentaciones, las conversaciones secundarias y las bebidas comenzaron, noté que las chicas eran agradables, pero no lo hice. realmente entro en el de ellos, y yo no bebí nada alcohólico, porque no estoy acostumbrado a tener miedo y pierdo la razón, porque vi como estaba Karina, y al poco tiempo terminó contando todo lo que le estaba haciendo prometido.

Y sus amigas prácticamente la apoyaron, no soy mojigata, pero no puedo ser tan abierta y moderna, aunque noté que una de sus amigas estaba en shock, porque los chicos son primos, cosa que hasta ese momento yo no sabía. No lo sé, y en ese momento comprendí el mensaje de su madre el día del desastroso almuerzo.

Pero finalmente la noche terminó y nos fuimos a casa.

Pasaron los dias...

Karina acaba de llamarme y me dijo que su prometido Adrian quiere reunirse conmigo en el centro comercial para comprarle un regalo especial y quiere mi ayuda.

Entonces mi hermana aprovechó para decirme que si iba a la Joyería, sería para mí elegir el regalo más caro que se pudiera encontrar, estaba un poco conmocionada, porque es claro que mi hermana solo quiere dinero. .

Pero mi hermana en realidad tenía razón, la reunión fue organizada por el secretario del director general, que es el prometido de mi hermana, en la rodillera.

Así que fui allí en taxi y no tuve problemas para encontrar la hermosa joyería en el centro comercial.

Al entrar a la increíble tienda, me perdí ahí mirando los enormes ventanales, e incluso suspiré con el encanto y brillo de las piedras preciosas.

Pero pronto una picazón familiar recorrió mi cuerpo, y pronto entendí por qué.

Realmente estoy en problemas, porque me acabo de dar cuenta de que desperté al sexo opuesto y al amor, y no podría ser peor, porque él es un hombre totalmente prohibido para mí, así que sacudí un poco la cabeza y es difícil de creer, en mi mala suerte, y una vez más siento que me arden las mejillas, y debo estar mirándolo nuevamente como un tonto.

Honestamente, fue una mala idea aceptar la invitación, pero ahora ya era demasiado tarde.

Adrian viene hacia mí, y estoy muerta de miedo de que mi voz no salga tan nerviosa como lo estoy.

— Gisele, ¡buenas noches!

Toma mi mano, en un gesto delicado saludándome...

Entonces, lo juro por el cielo, sentí un fuego inmediato por su toque, pero logré una sonrisa tranquila y respondí.

— ¡Hola, cuñado!

Adrian sonrió de una manera completamente diferente, incluso me estremecí, luego vino el vendedor y nos llevaron a la habitación privada.

Autor: Graciliane Guimarães

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