Catherine sonrió con amargura. “¿La esposa del primer ministro no te presentó a tres hombres excelentes? Para ser honesta, esos tres tipos no eran malos. Son hombres solteros, de buena apariencia, que vienen de buenas familias y tienen un futuro prometedor. Pero, no te gustó ninguno de ellos. Dime. ¿Dónde podré encontrar mejores hombres para ti? Puede haber tipos muy guapos, pero puede que no sean confiables, mientras que aquellos con buenas personalidades puede que no se vean bien”.

“¿Soy tan exigente?”. Solo entonces Freya se dio cuenta de ese problema.

“No eres exigente”. Catherine le dijo la verdad: “Es solo que cuando tenias mejores opciones antes, las que vienen después palidecen en comparación. ¿Entiendes eso? Teniendo a Ryan como punto de referencia, tu ojo para los hombres solo se volverá más estricto. Pero, ¿dónde puedo encontrar a alguien como Ryan que sea rico, guapo, de una familia prominente, caballeroso, elegante, divertido, romántico, sabio y tranquilo? Incluso si te