Ryan
Estoy que no puedo ocultar mi sonrisa, mi felicidad no me cabe en el cuerpo. Sé que no debo cantar victoria; sin embargo, anoche sentí su entrega, su amor, por mí, por los dos. No sentí celos, no quise matar a Bruce. Al verla abrirse cual flor en primavera, ver su amor, su paz con esta decisión. Todo estuvo más que claro. Hare lo que sea, por volver a verla así.
—Vaya, si apareció el alfa de la manada −dice mi hermano, al verme entrar a la casa −Ryan, que cara, parece que acabas de ganar la lotería. ¿y ahora a que debemos ese cambio? ¿qué paso?
—Estoy enamorado −digo y sonrió como si no hubiera días oscuros, ni tormentas. Escucho su burla por un rato mientras llegamos a mi despacho.
—Eso significa, ¿qué ya tenemos Luna?
—No, au