Generalmente me levanto por los rayos de sol que se cuelan en mi ventana pero a partir de ahora creo que la que se en cargará de levantarme será mi lobita.
-Bek - trata de despertarme con sus manitas en mi cara pero me gusta como hace pucheros así que le dejo seguir creyendo que estoy dormido.
-Bek despeta - dice mientras pellizca mi cachete.
-Bidan,tengo hambe - y creo que es la hora de levantarse.
-Está bien, ya me desperté - creo que es el mejor despertar que he tenido ¿por qué? Por qué mi lobita me sonríe cuando abro los ojos.
-po fin - lo que me causa una risa al ver su cara de alivio.
-Oye, sabes lo que es dormir en el suelo dos horrorosos días en el calabozo- no espero que me entienda por lo que dijo Dylan pero me equivoqué.
-Amy mala - dice mientras frunce su ceño y sus labios y es la cosa más tierna que he visto.
Diosa, eres un blando.
Hannah ¿qué haces en mi mente?
No quiero agotar a Mack así que me voy a aparecer más seguido por aquí.
-Bek quiedo ved a Nana
-Claro hermosa, deja me baño y vamos a la cocina, a ver si la encontramos.
Como me da miedo dejarla en la cama sola, la llevo a la pequeña sala que está enfrente de mi cama, la coloco en la alfombra le pongo las almohadas alrededor y para que no se me escape por curiosa le prendo la tele y le dejó un programa que se llama Escandalosos.
-No te muevas hasta que llegue, ¿está bien? - digo a lo que ella asiente con la cabeza.
Me baño lo más rápido posible para que desayune lo más pronto mi lobita.
Cuando salgo del baño ya cambiado y veo la sala me preocupo al no verla y al instante comienzo a buscarla por toda la habitación hasta que por mi oído de lobo pude escucharla su risa en la cocina.
Ya calmado me dirijo hacia allá y al entrar en esta, me encuentro con mi lobita recién bañada y con ropa nueva en su silla para bebés y a mi Nana con ella.
-Hola, hijo - me saluda con un beso en la mejilla - cuando toque a tu habitación para ver si bajabas a desayunar, tu linda mate se encontraba muerta de la risa con esa serie de niños
<<Cuando la baje para desayunar no quiso, dijo que tú habías dicho que desayunarías con ella.
-Gracias, nana y si le dije que iba a desayunar con ella por eso me bañé rápido eso y por qué me daba miedo dejarla sola.
-Claro, tú te bañas y mi niña sigue sucia ¿no? - me dice algo enojada- suerte que ya le conseguí todo lo que necesita y la pude bañar, pero como su mate te toca cuidarla y atender sus necesidades.
-Lo sé nana, solo que no se cómo hacerlo.
-Pues te voy a enseñar, no es mucha ciencia cuidar una niña.
-Gracias nana.
Sinceramente me da algo de miedo, ¿qué tal si se me cae? O ¿si se me ahoga?
Para eso se aprende y cuentas con mi ayuda, da gracias a Dios que Dylan y yo tuvimos hijos.
Cierto Blake, nosotros te podemos ayudar.
Gracias chicos.
-Muy bien y ¿Qué quiere mi niña de desayunar? - le pregunta nana a Mackenzie.
-Gadetas
-Y yo quiero un café
-Mack es una niña, no tú, si quieres un café levántate y háztelo.
Y con eso me deja, mientras me preparo mi café, nana le sirve sus galletas y un vaso de leche tibia a mi niña.
-Blake, te quería preguntar si me podría llevar la niña al centro comercial?.
-Claro que si nana- volteo a ver a mi niña para preguntarle- tu qué dices Mack, ¿quieres ir con nana al centro?
-Sip, ¿tú también?
-Claro que si, entonces deja le digo a Bruno que se queda a cargo.
Después de avisarle a Bruno que por cierto no sé quedó contento, partimos al centro comercial que se encuentra a una hora de la manada.
Y ahí nos pasamos como 3 horas de tienda en tienda, comprando ropa para mi nana y para mí niña, yo solo me compré dos camisas y un pantalón.
-ya nos podemos ir- les ruego a mi Nana y a Mack, por muy niña que sea le fascina la ropa, cada que ve algo le brillan sus ojitos y como negarme a eso.
-Bek quiedo eso - me dice señalado un vestido morado pero para señorita.
-Mack, ese es para niñas grandes.
-a mi gusto - me dice a punto de llorar.
-deja veo que hacer- le digo mientras entramos a la tienda y me acerco a la caja dónde está una pelirroja.
-Disculpa, ese vestido que está en el aparador ¿habrá para niñas?
La chica alza la vista y se queda viéndome un rato, no es por presumir pero causó eso efecto en las mujeres.
-Claro guapo, están en la parte de atrás, cerca de los vestidores - vaya se recompuso muy rápido- ¿quieres que te acompañe?
Antes habría aceptado sin dudar pero ahora tengo a mi mate y eso todo lo que necesito pero al parecer mi mate es una pequeña celosa.
-Es Mío - dice mientras se abraza a mi cuello.
Para mí es como estar en el cielo y hace ronronear a mi lobo, pero para los humanos es un simple berrinche.
-Hay que tierna, ¿es tu sobrina? - me pregunta pero antes de responderle lo hace mi nana.
-Es su hija, así que, por que no haces tú trabajo y nos traes el vestido- le ordena mi nana haciendo que la pelirroja se fuera a buscar el vestido enojada pero para Mack y mi nana esto no había acabado.
-Aquí tiene su vestido- le dice de mala gana a mi nana y eso fue un error.
-Esta talla es muy chica para mi nieta, tráeme una más grande- y la chica refunfuñando lo fue a conseguir.
-No crees que te pasaste - le pregunto divertido.
-Uno, es una zorra, dos ya estás comprometido y tres se nota que a Mack le desagrada.
Iba a decir algo pero la pelirroja llegó.
-Aquí tiene- en serio si la chica no se enojó antes con lo que mi lobita hizo la enfureció.
-Nana, ya no lo quiedo.
Idiota, está enojada.
¿Mack?
No, tu Nana...claro que Mack.
-ya oíste a mi niña ya no lo quiere.
Y con eso salen de la tienda, dejando a una chica furiosa y a mi corriendo detrás de ellas.
Para cuándo llegamos a la casa de la manada mi niña ya se había dormido.
-Hijo tenemos que hablar - me dice mi padre solamente entrando a la casa.
-Claro padre, deja acuesto a mi niña y hablamos.
Ya en mi habitación, la iba a costar en la cama pero ella se despertó y para mí mala suerte Dylan tenía razón.
-quiedo domid en mi cuato- dice enojada y ni siquiera me ve.
-¿no quieres dormir conmigo? - le pregunto algo dolido y ahí están las ironías, si me hubieran dicho hace un mes que estaría rogando, me habría muerto de la risa.
-No - y con eso mata mi corazón.
-No puedes dormir sola- no me voy a rendir tan fácil.
-Clado que puedo - me dice más enojada, si así es de pequeña no me imagino de grande.
-No lo harás.
Y empezó a llorar.
-Mackenzie eso es muy infantil- le digo ya enojado pero solo empeora las cosas porque ahora llora más fuerte.
-Blake, ¿que la haces a la niña? Hasta abajo se escucha su llanto- me pregunta mi mamá entrando a mi cuarto y en cuanto la ve Mack alza sus manitas hacia ella, y en cierto modo me duele porque trata de huir de mi.
Mi madre sorprendida por el gesto la carga.
-¿Que le hiciste?- pregunta ya enojada.
-Nada.
-Si no le hubieras hecho nada, no estaría así.
-Quie..quiedo id a m..mi quato - le dice entre hipidos a mi mamá.
-Claro mi niña- y al ver que iba a renegar se volteo y veo que de nuevo Arlette está presente- mañana hablaremos de esto y más te vale tener una buena escusa.
Dicho esto salen de mi habitación, dejándome con un vacío en mi corazón.