Corro detrás deella y no se detiene, la llamo por su nombre y aprieta el paso para alejarse demi, lleva un arma en la mano derecha y piensa usarla. Su figura es tan hermosaque me causa dolor en los ojos al mirarla, su cabello oscuro cae como unacortina lisa y se mueve de un lado a otro al caminar de prisa tratándo deescapar de mí. Grito su nombre y no gira el rostro, por el contrario baja lacabeza para que no la reconozca - o eso parece - dobla a la derecha en unacalle aún por sobre la acera y continúo tras ella, gritándo su nombre sinobtener respuesta. Al llegar a la esquina y doblar la encuentro de frente conel arma entre sus manos ¡va a dispararme! no le temo a la muerte, la he tenidomuy cerca y aunque todo me indica que es olivia... al levantar el rostro meencue