Charlie se quedó preocupado pensando que el capitán Walker talvez no le creyó y lo más probable es que se negaría, Charlie ya había comenzado a sudar frio por los nervios.
-¿Qué decidió capitán?, ya ayudarme o no? –Pregunto apenas vio al capitán bajar la mano del mentón.
-Ya tomé una decisión, ya que te debo una por ayudarme a descubrir a un criminal, decidí que voy ayudarte con esto. –Suspiro profundamente.
Charlie estaba rebosando de alegría, tanta que una sonrisa apareció en su rostro y con mucha euforia agarro la mano del capitán y la agito con fuerza en señal de agradecimiento.
-Antes que nada, dime ¿Dónde quedaste que te ibas a encontrar con Rafael? –Lanzo una mirada seria.
-¡Aquí tengo la dirección en mi teléfon