Capítulo 11.

Luego de que los bomberos, los paramédicos y otros agentes llegaran, vine a casa.

Me da paz ver a mi madre tan tranquila después de todo. Verme de regreso, la alegra bastante. A estas horas debe estar dormida y prefiero no molestarla. Voy a mi cuarto de armaduras para dejar la placa y todas las armas que llevo encima. Esta casa tenía tantas zonas espaciosas que no pude evitar volverla un todo por uno para mí.

Cuando estoy quitándome el reloj, siento una presencia detrás de mí. Entro en suspenso y solo siento mi respiración. Hay alguien detrás, estoy seguro. Lentamente cojo una navaja cerca de mis manos y la lanzo con rapidez hacia su dirección.

Efectivamente sí hay alguien. Se mueve ágilmente y detiene la navaja en sus manos sin que le corte ni un pelo. El cuarto está un poco oscuro así que no puedo verlo bien. Da pasos al frente lentamente, hasta que la lu

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