Para una marca internacional, incluso el vestuario era enorme con más de diez pies cuadrados.
Andrea estaba inexpresiva en ese momento, y de pie frente a ella había un hombre.
El hombre llevaba una máscara plateada en el rostro, por lo que sus rasgos estaban ocultos, pero su estatura era esbelta y delgada, y su voz era fría y baja.
“Ya te hemos dado muchas oportunidades y claramente tuviste muchas oportunidades de hacerlo, entonces, ¿por qué no lo hiciste?”.
Andrea lo miró con frialdad. En ese momento, su rostro ya no tenía esa sonrisa incómoda y terrenal que tenía afuera. Solo había una frialdad helada. Ella miró al hombre y dijo con frialdad: “¿Cómo puedo saber que dejarás a mi familia en paz cuando termine el trabajo por ti?”.
El hombre se burló y avanzó lentamente.
Cuando estuvo justo frente a ella, él de repente extendió la mano y la agarró por la barbilla. Su voz era tan ligera como la de un fantasma. “Crees que no dejaremos ir a tu familia, pero ¿cuál es el punto de manten