Narrador
ambulanteEn el instante que Alejandra dijo que rompió fuente, el señor Buggatti y su hija le ayudaron a llegar a su auto. El señor Carlos sabia que no había tiempo que perder, es realmente importante que lleguen rápido al hospital.
El padre de su esposo le pido la llaves de la camioneta, luego de saber a que clínica se dirigían la puso en marcha.
—Señorita por favor llame a mi esposo, mi celular esta en ese bolso— le pido Alejandra, tomando grandes bocanadas de aire.