CAPITULO 36 : Fin de semana - Domingo.
La mañana llegó, Alicia despertó y vio a Axel que lucía muy guapo a pesar de estar dormido; ella se acercó a él y lo abrazó muy fuerte.
—Sí que tienes fuerza.
Dijo Axel con voz baja.
—Ahh, perdón.
Alicia aflojó un poco el abrazo.
Axel también la abrazó con fuerza.
—No, está bien, abrázame. Alicia, estar a tu lado me hace muy feliz.
Pasaron varios minutos y ellos continuaban abrazados sin decir ni una sola palabra; realmente no era necesario, ambos se sentían felices.
Ese momento se rompió al escuchar el timbre de la casa.
—¿Esperabas a alguien?
Preguntó Alicia.
—No.
Respondió Axel, confundido.
Axel soltó a Alicia y se levantó de la cama.
—Espera, iré a ver quién es.
—Ok.
Axel salió de la habitación; Alicia se levantó de la cama y fue hacia la puerta de la habitación mientras Axel abría la puerta.
—¡Papi!
Corrió la pequeña niña y abrazó a Axel de las piernas.
Axel se sorprendió de ver a su hija frente a él.
—¡Mi amor! Qué sorpresa.
Axel levantó la mirada para ver a Elizabeth, la mamá de