La pistola se aleja de mi frente.
“Llévala de regreso a la bodega. Asegúrate de que ella sufra. Ella hablará, de una forma u otra. Simplemente aún no se ha desesperado lo suficiente”, dice Erik mientras exhala. “Hacerla desesperar”.
Me levantan del pelo, me empujan, me empujan y me lanzan en todas l