Capítulo 38. Cerrando un ciclo.

Me mira sacado de onda,traga en seco,su manzana de Adán se mueve en forma brusca.

—¿No era ésto lo que deseabas?—muevo las manos señalando mi cuerpo.

Su voz es quejumbrosa,aunque no se atreve a admitirlo le duele mi frialdad.

—De eso modo no quiero—

Me acaricia con la mirada y luego se aparta de mí.

Me siento en la cama y él me observa de pie.

—Yo no voy a permitir que tú amargues mi vida.

¿Por qué dices eso?

—Simple,si lo que quieres es poseer mi cuerpo a la fuerza,¡adelante!.

—¡Eres mía luna!—Su voz es ronca y transmite deseo.

—Vamos,¡hágale papito!,total no me quitas nada,sigo siendo una loba Alfa.

Él le da un con el puño cerrado al espejo de la peinadora y el vidrio se rompe.

—¿Así es la cosa?—yo lancé contra las paredes y el piso cada objeto que tenia cerca.

—¿Te volviste loca?—Me sostiene contra su pecho y me obliga a mirar su cara.

—No me intimida tus estallidos de ira—Lo observó en forma desafiante.

Baja un poco la guardia y me suelta,su tono de voz se suaviza,busca dialogar
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo