"Como dije, no me arrepentiré. Sobreviví gracias a Nanting. Logré sobrevivir en el hospital psiquiátrico porque seguía pensando en cómo Nanting quería que siguiera con vida y viviera una buena vida antes de morir. De lo contrario, me habría suicidado hace mucho tiempo", dijo Xia Xi mientras el sol brillaba sobre su rostro. Sus ojos estaban tranquilos como si hubiera pasado por todos los altibajos.

Miró suavemente la placa conmemorativa que sostenía. "Creo que apreciaré más cada día de mi vida después de casarme con Nanting. Él quería que viviera bien, así que haré todo lo posible para vivir bien. Después de que muera, ¡podré decirle que no desperdicié la vida que me dio!".

Gong Beicheng miró a la mujer frente a él y murmuró: "Mi hermano te amaba tanto que tal vez no quiera que sacrifiques el resto de tu vida por él".

"Se lo explicaré cuando llegue el momento. Le diré que esto era lo que yo quería", dijo Xia Xi.

¡Ella deseaba tanto... ser su novia!

Todo lo que podía hacer era estar