Puede que Dave fuera más capaz, pero estaba demasiado atrapado con esa mujer manipuladora. Quizá había llegado el momento de darle una oportunidad a Rupert.
Además, Dave se había enfrentado a él demasiadas veces. Cada una de esas veces solo había dejado a Lucas más decepcionado.
Cerró los ojos, pero la tensión en su rostro no desapareció.
Si Rupert demostraba ser capaz de dirigir la empresa, Lucas podría dejarle el control del Grupo Evans. Pero si Rupert fracasaba, sería su propio problema. Lucas solo esperaría y observaría.
Tan pronto como Rupert salió, contactó a Dave y le dijo que necesitaban hablar.
—Puedes decirlo por teléfono —respondió Dave fríamente.
Rupert mencionó que Lucas quería que se vieran cara a cara.
Una hora después, ambos se encontraron en la sala de recepción del Phoenix Alliance Group.
—Sea lo que sea, dilo ya. Estoy ocupado —dijo Dave, entrecerrando los ojos. Sabía que Rupert no estaba allí por algo bueno.
Debía haber un motivo detrás de esa visita.
Rupert esb