UN TRATO INESPERADO
ENZO
Lo cierto es que no sé qué es lo que tanto se trae entre manos este señor, más estoy seguro que tanto su hijo como a su nieto Nico no les irá muy bien, sé que él les hará pagar por todo el daño causado y creo que el destierro de la familia será el mejor de los castigos.
En cuanto a la relación que tiene con Ambra esa sí que me puso bien cabezón, por qué no sé en que momento se dio su acercamiento y mucho menos como fue que se ganó el cariño de este ser tan aferrado a sus tradiciones y valores, y sé que no debería extrañarme ya que Ambra es un pan de Dios y sabía que en algún momento lograría el cariño de toda la familia D’amico.
—No caviles tanto Enzo, así como ustedes hacen las cosas a su modo, yo también hago las mías a mi manera, por un lado mi nieto Maurizzio debía saber que no me iba a quedar de brazos cruzados cuando nos dijo que se iba a casar y mucho menos cuando se casó, así que después de comprobar la clase de persona que era su esposa, tuve esa co