YO ME CASARE CONTIGO

Doy un gran suspiro y mientras que él me ve con aquellos ojos yo me acuerdo que no debo prestar atención a este imbécil, que no es más que un hombre muy malo si me llegan a preguntar, es más que obvio que engaña a mi prima con aquella mujer y quien sabe con cuantas más, que descaro, la verdad es que me libre de mucho al notar como él me rompió el corazón y como no le importaría en lo más mínimo jugar con mujeres solo para divertirse, es un hombre asqueroso y ruin y lo quiero lo más lejos de mí, alguien con una apariencia tan perfecta y que sabe que puede jugar con las personas así, no me interesa, así que por los pocos días que estaré aquí quiero estar lo más lejos posible de este imbécil.

Por esa razón no debes prestarle la más mínima atención, solamente camine en su dirección y lo esquive por completo ignorando su mirada que sé perfectamente que estaba centrada en mí, después de pasar la puerta fue que pude sentir como mi respiración volvía, la verdad ni siquiera había notado que me había quedado sin respiración y que había olvidado siquiera hacer ese ejercicio tan importante para poder vivir, por esa razón solo debes mantenerte lejos de él Lea, solo debes estar lejos lo más posible de ese hombre durante estos días, lo más lejos, conviértelo en tu mantra, hazlo así.

--¿No me darás un abrazo después de todo este tiempo de no verme? La verdad es que estaba emocionado, en siete años de abandono lo mínimo que merezco es un abrazo… --esa voz tan masculina y seductora, el todo él es un peligro y no quiero que esté cerca de mí.

Por esa razón ignore por completo sus palabras y solamente me adentre en el lugar sin darle siquiera una mirada, mantente lejos de él Lea, solo mantente lejos, eres buena cuando te enfocas en una cosa, eres tan buena que no necesitas darte una mala vida con un hombre como él, solo vete y no mires hacia atrás, solo ignóralo y justamente cuando llegue a mi antigua habitación fue que logre notar que había llegado a esta de manera automática ignorando a todos a mi alrededor incluyendo al hombre que deje atrás, doy un gran suspiro y puedo sentir que al fin soy libre.

La verdad es que no sé cómo poder lidiar con todo aquello, la verdad es que no sé cómo voy a lograr siquiera poder soportar tantos días en mi antigua casa, en mi antigua ciudad, aunque si lo pienso bien es una tontería, solo debo seguir con las cosas como tal, Anakin Craig se casara con mi prima y el día tú no lo volverás a ver por qué estarás lejos de él, si eso mismo, eso es lo que haré, observo mi teléfono y noto un mensaje entrante, carajo lo había olvidado Luke…

Tal vez debes de estar ocupada entre abrazos y besos de tu familia, pero quería indicarte que te extraño demasiado y no veo la hora de tenerte cerca, estaré unos días más en Canadá y te aseguro que en tres días estaré allí para recogerte... Con amor tu prometido…

Si, sin duda alguna debo concéntrame es lo mínimo que él se merece, es lo único que puedo hacer, Luke no merece que sea tan egoísta por dejarme llevar por sentimientos tontos como envidia o resentimiento por él, por ellos, solamente debo estar aquí unos días y solo debo soportar esta estupidez por unos días, pronto estaré en suiza y cuando esté allí le avisaré a mi familia sobre la gran noticia, sobre el hecho de que estoy pronto a casarme y que escondí mi anillo de compromiso porque no deseaba que las noticias se interesaran en mí, solo eso, debo ser una chica lista, no debo dejarme llevar por mis antiguos sentimientos, debo ser astuta y sobre todo, debo estar lista en media hora, eso es un lío por completo cuando mi cabello es un desastre, pero tengo fe en mí misma, sí, claro que sí.

--Mira nada más… Es la chica más hermosa de toda la fiesta, mi hermosa medallista de oro ¿Dónde está la medalla? Quiero ponerla en mi cuello y mostrarla ante todos… --di una pequeña sonrisa hacia mi padre, ya que me ha encontrado con aquellos hermosos ojos dorados tan iguales a los de mi hermano y su porte tan parecido al de mi hermano, su cabello que una vez fue un rubio oscuro como el mi hermano que ahora es canoso y su porte alto y acuerpado que aún conservaba, todo un galán sin duda, por lo que mientras caminaba hacia las escaleras y enfrentarme con aquellos buitres, me agrado ver esa sonrisa tan suya en lo que le ofrecía un gran abrazo y luego su mano para guiarme hacia abajo.

--Papi… Que dicha verte, pero ¿Cómo traería esa cosa hasta aquí? Es la fiesta de Megan, no la mía, sería un acto de los más viles poder hacer algo como eso… --mi padre hizo una mueca de disgusto ante aquello y noté que las cosas con él seguían tal cual.

--¿Y qué importa? Megan no es mi hija, tú eres mi hija, si la atención se centra en ti, yo estaría más que dichosos en hablar ante todo de la magnífica hija que tengo, talentosa, fuerte y muy lista, toda una niña digna de ganarse la admiración de todos… --mi padre sin duda no cambiaba, recuerdo que él fue el primero en oponerse en mi viaje a suiza hace siete años, recuerdo que él incluso se había llegado a enojar y había llorado el día que me despedí en el aeropuerto, mientras que mi supuesta madre, bueno mi madre es otro tema.

--Al fin bajas, no puedo creer que seas tan egoísta en llegar tan tarde y además de hacerte esperar, Megan no merece tal trato de tú parte.

--Hola madre que bueno verte, tantos años lejos y al fin nos vemos, sin duda alguna las cosas siguen igual… --la mirada azulada de mi madre se mostró bastante enojada, ella seguía siendo la misma, la mujer que nunca le dio un solo cariño a su hija y solo se concentró en su hijo y en su sobrina.

--No me vengas con esas tonterías, la que decidió irse, fuiste tú, nadie te lo pidió, así que no vengas con tonterías, Megan merece un poco más en su día, yo no voy a permitir que…

--Basta Kiara ¿Qué es esa manera de tratar a tu hija? Ahora, ¿Por no vas a ver si necesitan tu ayuda los del banquete? --sin duda alguna las cosas no cambiaban, mi madre siempre tratándome como si fuera su enemiga y como si su verdadera hija fuera Megan, mientras que mi prima mayor siempre recibe todo su amor y atención.

--Lo que faltaba, ahora paso a ser del servicio de comidas… --su caminata fue dura y concisa, sus zapatos finos al igual que su vestido se alejaron de mi vista, mientras que mi padre parecía estar completamente apenado como siempre por el hecho de tener una madre como esta.

--Cariño, lo lamento, sabes que tu madre es…

--Lo sé… Tengo algo de hambre, ¿Te parece si primero voy a comer algo y luego recibo las disculpas de tener una madre como la que decidiste darme? --no había nada que pudiese decir, solo vi cómo me daba el espacio suficiente como para que caminara hacia la mesa del banquete y yo me alejaba de su lado mientras sin decir ni una otra palabra sobre el tema, porque los dos sabíamos que llegar a tocar el tema solo haría que las cosas se hicieran algo turbias.

No podía creerlo, siempre era lo mismo, pero la verdad es que al principio mientras que yo era una niña había llorado tanto por la indiferencia de mi madre, el hecho de notar que mi madre amaba tanto a mi hermano Andreas y a mi prima Megan, ver como los trataba como si ellos fuesen los seres más maravillosos del mundo, mientras que yo no era más que la persona más odiada por parte mi madre, ella parecía que todo lo que yo hacía le hacía enojar, parecía que no había nada más problemático que yo en su vida y justamente en aquel entonces recuerdo como Barbie y yo tomamos un cabello suyo y casamos pruebas de ADN de mi madre y mías, efectivamente resultaba que yo si era hija de mi padre, pero no de ella, era la hija de la amante de mi padre, por eso no me perezco en nada a ella, su cabello negro y su piel blanca, sus ojos azules y su estilo de reina era muy diferente a mí.

Mientras que yo rubia soy de cabello revuelto, muy distinto a mi padre incluso, pues mi rubio es color más cenizo que el de Andreas, además del cabello lizo y sedoso de todos ellos, nada que ver con mi cabello rizado y descontrolado que solo era dominado cuando lo recogía en mis entrenamientos y en las competencias, no había nada más que hacer, él era mi padre, Andreas era mi hermano, y esa mujer a la que yo llamo madre que ahora estaba llamando la atención de todos en las escaleras no era mi madre, solo era alguien que ante todos se comportaba como una y cuando estábamos solas o con la familia me trababa como un cero a la izquierda, jamás fui lo suficiente valiente para indicarle a mi padre que sabía la verdad, además del hecho de que jamás tuve la capacidad de enfrentar muchos de mis problemas, ¿Por qué este si sería la diferencia?

--Hola gracias a todos por venir a la fiesta de compromiso de mi hermosa Megan… --mi madre hablo llena de orgullo, en lo que dio un gran suspiro y espere lo que venía de su boca, mientras me tragaba un pastelillo, sin duda estaba delicioso, sé que Dany me castigara por no cuidar mi peso en mis vacaciones, pero no me importaba, por lo menos no ahora --He de tener el honor de presentarle a los novios a ustedes nuestros sublimes invitados… Con ustedes Andy Craig y mi bella Megan Roy…

Los aplausos no se dieron a esperar, todo el mundo estaba dichoso y yo claro que lo estaba, me estaba ahogando con mi pastelito, incluso sentía que lágrimas salían de mis ojos mientras tosía, debí haber tomado algo, pero ¿A quién engaño? No estaba así por eso, estaba de esa amanera porque era Andy, no era Anakin, era Andy no entendía nada, solo sabía que ahora me estaba ahogando y no sabía cómo haría para no pasar vergüenza, pero entonces alguien golpeo mi espalda mientras me ofrecía un vaso con agua, al ver su mano tatuada y al ver la flor que ya había visto antes, agradecí a mi hermano Andreas por venir en mi ayuda.

--Gracias, no sé qué sería de mí sin ti… ¿Por qué Megan se casa con Andy? No lo entiendo, yo creía que su futuro esposo seria…

--¿Yo? ¿Creías que Megan se casaría conmigo? No mi bella hada de hielo, yo no me casaré con Megan, yo me casaré contigo obviamente…

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo