Capítulo 21; Lo siento ~Hugo~ Me alejo de mi padre sintiendo la impotencia y la rabia apoderarse de mí. Siento mis lágrimas rodar por mis mejillas y con todo el enojo dentro de mí agarro a patadas y a puñetazos una pared, sintiendo el dolor en mi mano que es mucho más leve que el dolor que siento en el alma. No quiero echar a perder mi vida al lado de Jane, no siento nada por ella que no sea odio y ganas de joderle la vida de la misma manera que lo acaba de hacer conmigo. Ni siquiera pretendo ser el padre de su bebé, yo quería una familia, pero no con ella, no con la mujer que apareció una noche en mi vida y volvió todo un maldito infierno sin regreso a la vida que tenía. Con la persona que quiero estar está a unos metros de mí en la iglesia esperando con el corazón roto y tan llena de dolor como yo, habíamos planeado esto desde que éramos novios y ahora ya no sucederá. Nora nunca va a perdonarme haberle roto el corazón después de tantos planes que teníamos. Me dolió saber que no

Capítulo 23; Borracho~Jane~Dejo salir una bocanada de aire, mirando por la ventana, tengo una buena vista y todo se ve tan silencioso desde aquí. Ojalá todo fuera tan tranquilo siempre, pero no es así, los periódicos están atacando a Hugo, y la prensa no me dejó tranquila hasta que Sandra les tiró agua.Sí, ella tiene la actitud.Está lloviendo, la tasa de chocolate en mis manos, mi pijama de conejo y mi nariz aguada son la muestra de que amo la lluvia, pero, normalmente, me hace sentir melancólica. Me vuelvo una sentimental de lo peor cada vez que llueve. «Fracasé cómo mujer fuerte».Siento que la lluvia podría guardar tantos sentimientos como los que tenemos guardados. Muchas personas pueden ver de diferentes maneras la lluvia, sin embargo, a mí me parece la manera exacta de expresar tristeza. Justo por eso cada vez que llueve me gusta mirar desde la ventana.La puerta se abre y volteo sabiendo que es Sandra, le sonrío hasta que veo que trae a la fuerza a Hugo, está lleno de gol

Capítulo 25; Gran secreto ~Hugo~ Tengo que admitir que tuve toda la intención de no a ayudar, pensé que podría ser la oportunidad para librarme de ella. No se veía bien y por mi cabeza pasaba la idea de dejarla tirada en el piso y no hacer nada, mis problemas terminarían. La única razón por la que le ayudé fue por Sandra, ella estaba en el mismo bar que yo anoche que me golpearon y fue quien me ayudó, tenía que devolverle el favor de alguna manera. Aún sigo en el hospital, Sandra se ve algo nerviosa por lo que está pasando, no quiero dejarla sola. Estoy concentrado en un punto fijo y veo que pasa Nora, hace días no la veía, se ve tan hermosa. No lo dudo y la alcanzo, pongo mi mano en su hombro haciendo que voltee a verme, en cuanto me ve se aleja. —Nora… —Te dejé claro que no quería que me hablaras, ¿te está quedando grande? —Yo no quiero estar sin ti, no puedo. Llevo mis manos hasta sus mejillas, me acerco para besarla, veo que también tiene ganas, pero da un paso atrás. —N

Capítulo 27; Sin límites ~Hugo~ Si de algo estoy seguro es que una de las personas que peor me cae es Jane, es irritante y no la soporto. Su presencia suele ser molesta e incómoda en cada una de las ocasiones en las que hemos estado en el mismo lugar después de habernos conocido. Es como si su existencia me molestara y quisiera que no estuviera. Los dos tenemos el mismo carácter de mierda, los dos estamos tan acostumbrados a que todo sea a nuestra manera y eso solo me hace pensar que es mi gran karma. No había conocido a alguien que me sacara de mis casillas tan rápido como me sucede con ella, es impresionante cómo logra descontrolarme y alterar todo de mí cuando la tengo cerca. Son muchas las cosas malas que pienso de ella, sin embargo, verla a unos centímetros de mí en silencio respetando mi espacio al ver que estoy sentado en la tumba de mi madre con mis ojos llenos de lágrimas, hace que tal vez mis expectativas sobre ella se desvíen un poco. No se ha molestado en hablar, ún

Capítulo 29; Rivales ~Jane~Cierro la puerta detrás de mí y la empujan con fuerza, haciendo que me golpee, me quejo sin saber quién lo hizo, hasta que aparece una enojada Nora, dándome una cachetada sin yo esperarla. —¡Eres una mala hermana! —me grita—. ¿Ya estás contenta porque tienes a Hugo? —Nora, vete, no quiero problemas contigo.—¡No te hagas la mosca muerta! —pone sus manos en mi pecho y me empuja haciéndome caer en el sofá—. ¡Yo los vi juntos! Él te llevaba cargada.—Lo que pase con nosotros no es tu problema, ya no están juntos.—¡No estamos juntos porque te metiste en medio! ¡Lo arruinaste todo! Se me tira encima, y esta vez no me quedo sin hacer nada, la hago a un lado, haciendo que se quite de encima. No puede venir a hacer dramas en mi espacio.—Vete, no quiero que estés aquí, no puedes venir a insultarme cada vez que te dé la gana.—¿Por qué tenías que acabar con todo lo bueno que teníamos? ¡Tuviste la oportunidad de volver y fallaste! Yo amaba tenerte de nuevo, iba