—No puedo creerlo ya es lunes, queria que fuera fin de semana eternamente ¡quiero regresar!—Tienes que trabajar Marcela, no puedes pasar de farra para toda la vida, en algun momento tendras que asentarte, ya no somos jóvenes cariño—Puedes sentirte lo vieja que quieras, no me meto, yo por otra parte me considero una quinceañera que no necesita sentar cabeza—Mejor cambiemos de tema ¿Cuándo vas a poner el visto bueno sobre el salón? La gerente del hotel me trae loca—Concreta una cita para hoy a las dos de la tarde nos veremos en el salón del hotel, para ultimar detalles, estamos a menos de tres dias del concierto y aún faltan algunas cosas —No te preocupes cariño todo saldrá bien, debemos hablar con el telonero y coordinar todo—Quiero cambiar de telonero, que no sea Caleb Alcalá—¿Cómo? El galán es tu telonero ¿Fue el quien hizo la audición?—Si, como lo escuchas, el caballero fue el que nos engañó haciéndose pasar por músico para acercarse a mí, como te diste cuenta es un picaflo

—¿Encontraron a Sate?—No señor Nobis, tenemos una buena pista—¿Por qué siguen aquí si tienen una buena pista?—No hemos actuado porque la pista lleva al lugar donde se encuentra la señorita Evangelina, no sabemos como actuar ¿Cuál es su orden?—¿Esta con Evangelina?Miro la Tablet que le extendió su jefe de seguridad, sorprendiéndose en el acto, se suponía que Evangelina odiaba a su padre, parece que se llevan muy bien según las fotos y videos que estaba mirando, parecen cercanos, Leandro rio con ironía al entender que padre e hija le vieron la cara tantos años, ellos son los causantes de todas sus desdichas, el mismo sello su destino al creerles más que a su esposa, por ellos la perdió —La orden es la misma, tráiganlos hasta mí, yo me encargaré de ellos personalmente ¿Qué saben de Dulce?— La señora D´Maria está esperando la inauguración de su estudio de música y el concierto que va a brindar, está muy feliz con lo que hace —Es una buena noticia, sigan cuidándola y manténgame

—¿Cómo que se fue? ¡Es imposible, teníamos un contrato!—Debe calmarse señorita D`Maria, Adriano debe estar rumbo a su casa con una buena compensación sin hacer nadaMiré a la secretaria de Caleb y seguí mi camino, el asunto del telonero era que tenía que poder seguir mi música y acoplarse sin ningún problema y justo Caleb era el único que podía hacerlo y lo hizo espectacular—Son una pareja genial, el sonido del piano es perfecto, puedes enamorar con solo usar un simple sonido—No había escuchado a alguien que pudiera igualar el talento de la señorita D`Maria, lo bueno es que ya regreso, tras muchos años de ausencia no vuelve a regalar su melodía—Estas hermosa Dulce—Usted también está guapo señor Alcalá—Se agradece el cumplido, pero esta noche vine a hacerte brillar Dulce, esta noche tú eres la estrella —Usted lo dijo, bueno empecemos el verdadero regresoLos ojos de ciertas personas estaban llenos de cierta incredulidad, mientras que otros tantos estaban rebosantes de alegría, la

—No sabía que el señor Alcalá, fuera tan machista, uno aprende cosas todos los días, pero se equivocó conmigo, no soy un juguete que puede arrebatarse de las manos de otro y lucirme como trofeo ¿entiende eso?—No te veo como trofeo Dulce, no sabes cuánto llevo esperando que dejes a Leandro, no tienes idea del tiempo que te he amado, ahora que la vida me dio una oportunidad no voy a desperdiciarla—Me trata como uno ¿se ha dado cuenta?—Una cosa es que usted está empeñada en verlo así, otra cosa es lo que yo hago y usted no se da cuenta Dulce, sigue herida por lo que paso con su expareja y refleja sus miedos hacia mis sentimientos, yo seré paciente si espere doce años para que se dé cuenta de que existo, imagínese si no poder aguantar unos meses mas—¿Doce años?—Tal vez no lo recuerde, hace unos años usted tuvo un pequeño percance en su coche saliendo de la universidad, yo la ayude y quede prendado de su belleza, luego me enamore de su entereza y después caí rendido a sus pies por su

La sorpresa en el rostro de Caleb era entendible, no pensó que su “Dulce pequeña” en realidad fuera un dulce que sabía tentarlo tanto, el auto seguía rodando, al parecer iban a un lugar alejado de la ciudad—¿Dónde me llevas?—Una reina no debe ir nada más que a su imperio y a ese lugar vamos, que creías que te llevaría a un sucio hotel, eres especial Dulce, eres la diosa de mi mundo—Me encanta la respuesta, le escribiré a Marcela para que no se preocupeCaleb movió las manos, tomando su diminuta cintura para bajarla, sin embargo, Dulce se recostó en su pecho acomodándose para enviar el mensaje, dejando perplejo al hombre debajo suyo—¿Dónde te fuiste cariño?—Estoy bien Marcela, no te preocupes no me sentí bien y mejor me regresé—Me parece bien, nos vemos mañana entonces, cuídate bebe, vuelve a casa sana y salva, avísame si necesitas algo— No te preocupes, además es tu “miércoles de casería” no la interrumpiría por nada—Te amo nena, nos vemos mañana, si despierto—Llegamos señor