POV : SAVANNAH [Parte II] * * * * * * * Me di la vuelta para que no pudiera reconocerme, casi corriendo hasta la mesa de postres para esconderme detrás de una torre de chocolate. — Quiero agradecerles a todos por acompañarnos en esta celebración. — Vi como Maximus se movía sin esfuerzo en la pequeña plataforma. Todas las mujeres que lo veían se sonrojaban. Yo hice todo lo que pude por apartar la mirada pero no resistí. Estaba muy sexy con su traje gris y su corbata plateada. «Él sabía que llamaba la atención» Que descarado...Después de hacer el tipo discurso lamebotas a todos los ejecutivos, mi padre se acercó a él para darle un apretón de manos, era el momento de partir un precioso pastel.— Pueden prestarme atención. — Dice mi padre. Hubo un ligero aplauso.— Está noche no seria nada sin la presencia de mis hijos así que antes que nada quiero pedirles un aplauso para ellos. — Mi corazón latía a un ritmo traicionero. Luke y Maddox saludaron sin ningún problema pero yo s

POV : SAVANNAH. Página 8, Revista sobre chismes de Famosos. Estremecimiento, agitación y especulación a sacudido los pasillos de CINDER&MOON. Cuándo la representante del soltero más cotizado del año, lanza la noticia de manera extra oficial a los medios, comunicado que rezaba lo siguiente: "Mi hermano se ha enamorado por completo de la mujer que ha sido su rival durante años" El tan anhelado escritor no se ha pronunciado en cuanto a los motivos que lo han llevado a anunciar está decisión tan dolorosa para todas las Maxilovers de la ciudad. * * * * * * * Me desperté en plena madrugada con un sudor frío y sintiendo que había cometido el error más grande de mi vida. Tenía un montón de notificaciones por el anuncio de mi noviazgo y una gorda de paparazzi en la puerta de mi casa. Se suponía que era algo sencillo pero casi caigo tendida cuándo me llegó por correo el descabellado itinerario que su representante había planificado. Ella lo había actualizado infinidades de veces y seg

POV: MAXIMUS. [Parte II] «Si, todavía estábamos en el día uno».La habitación derrochaba lujo y glamour en cada rincón.El hotel era de un estilo Art Nouveau, esplendorosamente sobrio y marcado de manera muy sutil. La construcción parecía de ser de mediados de siglo, pero con una modernización espectacular que permitía tener todas las comodidades y derroches sin perder ese elemento de lujo coqueto que recordaba la época de los años veinte.Un gran ventanal se abría hacía el balcón que ofrecía una estancia comodísima por sobre la piscina del hotel; a lo lejos, se le regalaba al huésped una vista panorámica y espectacular del atardecer que ya se cernía sobre el valle de tonos ocres y dorados donde había crecido el Cupido que ahora todos conocían.El clima, los olores, los colores, todo me hacía sentir como en casa.La iluminación de la habitación, los muebles, el baño con su tina, la cama endiabladamente cómoda, la decoración sensual, el servicio inmejorable, la comida; todo era un gus

POV : MAXIMUS.El vaso de whisky volvió a quedar vacío. Era el tercero en menos de diez minutos.La espalda me estaba matando, pero era culpa de esa jodida bañera tan dura.“Calma Max” me dije a mí mismo, pero yo sabía que no serían suficientes unas simples palabras de mi consciencia para traerme de vuelta a la realidad.Yo sabía que teníamos una agenda abarrotada y que el segundo día apenas estaba iniciando, pero después de aquella desastrosa entrevista que revolvió todo el asunto ese con mi familia, no pude evitar volver a mi soledad.No estaba en mi casa, pero aquel balcón de la habitación matrimonial que Mary había reservado para nosotros me sirvió como puerta de escape. Miré la pantalla de mi móvil y ahí seguían esos mensajes sin leer.Las lágrimas pujaban por encontrar un camino hacia el exterior, pero mi decisión era firme e irrenunciable: No estaba dispuesto a llorar nunca más por ese tema.Pasé de largo y me fui a ver las primeras reacciones de aquella entrevista: Las reacci

POV : SAVANNAH. [Parte II] [...] Todavía tratando de recuperar mi respiración, me volví hacia el fotógrafo y Mary. Está última estaba fingiendo que aplaudía sin parar. Tampoco dejaba de gritar: «¡Enhorabuena!» «¡Por fin!» «¡Fue genial!» Mientras que el fotógrafo continuaba allí sonriendo. — Que buena foto. — Nos dice, hasta que llega Maximus y me toma de la mano. — Si necesita otra toma estaremos encantados de volver a repetir. — No, señor. La tengo, es perfecta... — Ahhh...! ¡No! ¡Gata mala!— Unos gritos provenían desde el interior y supe de inmediato que Kitty estaba haciéndo un desastre. Me moví lo más rápido que pude, una chica del catering estaba tratando de bajarla de una repisa alta hasta dónde ella había trepado. Se veía muy asustada, en cuanto la chica la gritó de nuevo movió su cola y derribó varias vasijas de porcelana. Ese parece ser algo muy costoso. — ¡Kitty no!— Le grité desde abajo. Lo primero que se me ocurrió fue buscar una banca pero no encontré u