Hannah se encontraba en el despacho de su Majestad mientras un dolor intenso se apoderaba de su cuerpo quitándole hasta el aliento. El fuerte estruendo que se escuchó advirtiéndole de un peligro inminente. Sosteniendo su vientre e intentando con gran esfuerzo llegar hasta la puerta para descubrir lo que sucedía. _¡Resiste bebe!, dijo tratando de controlar su respiración, cuando a lo lejos ve a un guardia corriendo hacia su dirección. _¡Oh por Dios!, ya llega... dijo al ver a Hannah retorciendo de dolor. _¡Señora el refuerzo acaba de llegar!, dijo luego la acompañó a recostarse sobre el sofá mientras iba por ayuda. _¡Max, ven por favor!... gritaba de dolor. Por fortuna el guardia no tardó en encontrar ayuda y rápidamente tres mujeres corrían hacia su dirección. Hannah gritaba de dolor, no podía negar que tenía mucho miedo. _El bebe ya viene, dijo una de las mujeres. _Aun me falta un mes... ¿qué está pasando?, preguntó pero no obtuvo respuestas. _Llamen al doctor Corte. ¡P

_Si hay que revivir a un muerto lo haré, voy a encontrar a mi hijo, dijo Max antes de ir trás una pequeña pista. Ronald observaba con atención la escena se le hacía muy familiar a lo que había ocurrido hace veinte años atrás con Bartolomé. En esta ocasión, no pudo percibir el aroma de algún otro lobo que de los cadáveres que permanecían en la entrada. Ninguno de ellos pertenecían a una manada, y lo más sospechoso era que habían humanos involucrados en ese asunto. Las cámaras estaban fuera de servicio en ese momento, no había pruebas concretas, aunque eso fue lo que creyó hasta que revisaron las pertencias de los cuerpos. _Ésto fue lo que encontramos, comentó uno de los hombres entregándole una tarjeta algo que sorprendió a Ronald. Lo sostuvo en sus manos mientras trataba de atacar cabos sueltos... ¿por qué esos hombres llevaban tarjeta de acceso de su compañía?, ¿acaso son empleados nuestro?, se preguntó. Tenía muchas personas trabajando en el mundo de los humanos, era difícil id

Punto de vista de Max Mí hermosa Luna junto al pequeño Murat duermen plácidamente y eso me llena. Yo por otro lado tengo asuntos que atender para garantizar su seguridad, por esa razón me encargué de reunir al consejo que irán tras la pista del príncipe Lorenzo. He dado indicaciones precisas para no levantar sospecha no queremos ocasionar una guerra innecesaria, solo hay que encargarse de cortar la cabeza a su líder, y por otro lado tengo un asunto que solo yo puedo resolver. _No quiero que nadie más lo interrogé, yo me haré cargo, escuché decir a mi padre refiriéndose al padre de Hannah. Aunque tan solo recordar lo que hizo me dan deseos de desgarrar su carne, no conozco la relación que tiene mi luna con él y sé que mi padre acabará con él. _No. Lo haré yo padre, le dije para que lo mantenga con vida. _¡¡Guardias!!. Con todo lo sucedido no he tenido tiempo de hablar con Joel, me debe una buena explicación. Lo mandé a traer con urgencia ante mí. Desde que estamos juntos jamá

Salimos de Stonehaven sin que nadie lo notará, no podemos permitir que nadie nos vea por aquí, eso solo arruinaría todos los planes. La información que Matthew nos ha proporcionado en sus estadías en la celda a sido clave. Desde un inicio sabía que algo más escondía, no hemos tenido una buena relación pero lo conozco bien. _Estuve a punto de cortarte la cabeza... le dije pensativo. _Fue un riesgo que acepte tomar. Sabía que no lo harías. _¿Qué fue lo que te hizo pensar así? _Tu conciencia...río. _¡Qué idiota!. No creo que esto solo lo estés haciendo por Rouge. Será mejor que me lo digas ahora. _He trabajado muy duro para ganarme un lugar en Rouge. No ha sido fácil... me respondió pensativo. _Tu has sido de gran ayuda para lograrlo, continúo _No entiendo. ¡Explícame! _Me has tratado como tu igual, siendo solo un criado. Quiero que todo se resuelva, y cuando eso suceda, te darás cuenta de si miento o no, dijo. Yo me quedé pensativo mientras reflexionaba acerca de su

Marcharon camino a Rouge en silencio algo que incomodaba a Matthew después de lo ocurrido. Por el momento un sentimiento se apoderó de el al encontrarse frente del lugar que llamo su hogar. Max permanecía indiferente, no hizo ningún comentario cuando iban ingresando a Rouge, Matthew se encontraba muy nervioso pues temía su destino. El coche se detuvo, Max descendió al igual que Matthew quién sin darse cuenta bajo la guardia por la emoción que sintió. “Mi querido Rouge”, susurró. Observó a Max alejarse de él, y los guardias de la entrada se alertaron al verlo. Sin mostrar resistencia, Matthew extendió sus brazos para que los guardias hicieran su trabajo. ....... Max se dirigió hacia su habitación, dónde se encontraba Hannah junto al pequeño Murat. Una sonrisa se dibujo en su rostro y su corazón se llenó. Hannah hizo señas con el dedo para que no hiciera ruido. Lentamente Max se acercó a ambos y beso la frente del pequeño. _Permite que su padre lo cargue un momento, dij