—Los días pasaron, entre el ir y venir de los trabajadores de los Becker, no quise que vendieran la casa, el señor Becker muy amablemente me dijo que le dijera que tipo de remodelaciones quería, mando a hacer una piscina en el patio trasero para los niños, en medio de toda esta felicidad y algarabía falta él, aunque no quiera reconocerlo —Tranquilo amor, él se dará cuenta de lo estúpido que está siendo y vendrá de rodillas pidiendo perdón, solo espero que no sea tarde —¿Enserio lo crees Raúl? —Estoy más que seguro Harper, al menos por los niños puede venir a poner la cara —Me estas tratando de consolar de esta manera —No solo quiero que dejes de esa carota y te pongas algo contento ya que mis hermanos y mi padre estan por llegar Leticia y Fabricio aun no estan listos, no dejan que las niñeras los cambien —¡Raúl! Sabes que a ellos no les gustan los extraños, y ellas lo son para ellos deberías haberla ayudado en vez de ayudarme a mí, saca la mano, hable en un jadeo —Tenemos día

—Cuando el comienza a hablar asi me asusta, ¿Cómo quiere que esté tranquila? Dime que pasa Oscar, no me pongas nerviosa   —Suspire peinando mi cabello con las manos, no sé cómo tomara Lind lo de su papá, lo que Raúl me dijo no es nada bueno. Por donde comienzo   —Por el principio ¿no?   —Me reí de su ironía, Lindsay Swan Díaz   — Te corrijo Lindsay Rengel Díaz   — Como usted diga señora Rengel. Me puse serio de verdad me costaba darle la noticia que tenía a Lind   —Vas a seguir ocultándome lo que sabes, me acerque lentamente, lo tome del cuello de la camisa le di un pequeño beso para regresarlo a la realidad ¿Ya te aburriste de jugar a la familia feliz? Si es asi y……….   —¡Por Dios Lind! Siempre piensas lo mismo, la tome de la cintura y la bese con ira, causándole dolor al morder su labio, debo cambiar la forma de pensar de esta mujer. Se

—Esta noche fue la peor de todas, me dolía todo el cuerpo, las sogas que usaron en mi laceraron mi piel, los golpes recibidos eran cardenales que la adornaban, mi vagina estaba desgarrada y sangraba, no quería ni ver lo demás, Neptaly me cargo y me llevo en el auto hasta el hotel, para que luchar no lograba nada —Sentí su cuerpo liviano, las sangre que brotaba de su cuerpo manchaba la inmaculada sábana blanca, su cuerpo temblaba, sollozaba bajo, ni siquiera se movía era como tener a una muñeca rota entre mis brazos ¿Rosalyn cómo te sientes? —Disculpe que lo interrumpa señor, la señorita no puede hablar tiene muy irritada y un poco desgarrada la garganta, no puede usarla por unos quince días, eso dijo el doctor y que deberíamos llevarla a un hospital, los “señores” fueron muy rudos con ella, esta desgarrada y dolida por todas parte —¿Qué? —Eso dijo el doctor, no creo que mienta, cuando vine a recogerla estaba tirada en el suelo inconsciente, trate de cubrirla, se asustó mucho, solo

—El día de la subasta, me contuve de quedarme al lado de Rosalyn, desde el día del “accidente” en el club, se reúsa a comer, se mantiene por sonda alimenticia, solo deja que le chofer la acompañe y la consuele, no me deja acercarme a ella, solo debo ser paciente y esperar a que mejore para poder seguir como antes o eso quiero pensar —Que bien se ve hoy Neptaly —Lo mismo puedo decir de usted señor Richmond, se ve deslumbrante, su traje de brillo era demasiado ostentoso para mi justo —¿Cómo está el angelito? ¿Por qué no te acompaña hoy? —Si habla de mi esclava, aún se está recuperando de las innumerables lesiones que tiene, aparte de su garganta y algunos puntos que tuvieron que cogerle, que por respeto no le digo donde son, pero puede imaginarse —¿Qué? —Vi su cara de asombro y me quedé algo sorprendido ¿No sabía nada? O me estaba mintiendo —¡Eso no puede ser! Les asegure a los dueños del bar que ella era sagrada y nadie podía lastimarla, ya que tenía seguridad me retire con mi

—Los días pasaron, y lo que se retrasó llego. Los hermanos de Oscar venían a visitarnos, querían conocer a la niña y por supuesto matarme a mi o mejor dicho cerciorarse que era verdad—Es hermosa Oscar, es una muñeca—Te luciste con ella hermano, lo bueno es que se parece a la mamá y no a ti—Es bueno que estén aquí ¿Cómo estuvo el viaje?—Pesado, pero nada que no se pueda soportar ¿Verdad Mafer?—Asi es Aarón, era más la emoción de conocer a la nena y volver a ver a la señorita Swan —Sonreí un tanto incomoda, ya no me gustaba que me llamaran por ese apellido—¡Lindsay! ¿Puede seguirte diciendo asi?—Claro Aarón—Compórtate Aarón, recuerda que es tu cuñada y la madre de tu sobrina —No me lo tienes que recordar Oscar—¿Cómo se encuentra señorita Swan?—Dime Lindsay o Lind como mis amigos me dice—Está bien, Lindsay necesito aclarar un poco las cosas, hasta hace poco mi hermano estaba comprometida con una ex compañera de la universidad y luego usted apareció con un bebé y todo se revo