Tanto Rosario como Júpiter sembraron las semillas de la venganza con sus acciones, arando la tierra según la conveniencia de cada uno, aunque pareciera ser que en este caso específico Rosario contaba con la ventaja al haber secuestrado a los mejores amigos de Júpiter que sin saberlo se encontraba completamente satisfecho de llevar a cabo ese último paso que planeo juntamente con Akane y Samael desde el principio de la operación, pero a todo esto ¿Júpiter podría salvar a sus amigos de las garras de Rosario? Era lo que precisamente Júpiter averiguaría al momento que se enterara de las acciones que su amante llevo a cabo para presionarlo sin saber que Júpiter actuaria de la manera en la que actuó al dejar a Rosario prácticamente en la calle sin su dinero y negocios.Melquiades emocionado con la situación y creyendo que todo mejoraría para bien en ese momento, no se imaginaba que Rosario para entonces se encontraba en total desesperación y angustia en intentar recuperar su fortuna y lo qu

— ¡Esto en verdad tiene que ser una broma y de mal gusto! — Expreso Rosario al momento de observar el rostro frente a ella y el rostro que ocultaba esa mascara, para ella era más que inapropiada la situación y consideró en ese momento que se le estaba jugando una pésima broma a pesar de saber que la vida de Samael y Akane se encontraban en juego ese día, por lo que ella sin dejar hablar a nadie, se acercó a Akane y tomándola por el cabello la aventó al suelo y coloco la punta del arma en su cabeza para luego exclamar.— ¡¿En dónde demonios se encuentra Luzbel el verdadero Luzbel?! Tienes exactamente diez segundos para hablar.Entonces Ariel según Rosario hablo de inmediato al observar que Rosario no estaba jugando a pesar que en verdad se trataba del mismo Luzbel el que se encontraba frente a ella, pero todo debía ser revelado en ese momento y que ella comprendiera porque supuestamente Ariel era el que se encontraba presente y no el verdadero Luzbel.— Antes que cometas una verdadera

Júpiter comenzaba a ganarse la confianza, así como a jugar con los sentimientos de Rosario, aunque Júpiter no se encontraba muy lejos de sentirse mal por provocar ese tipo de circunstancias que tras una ardua batalla en su interior por dejar de sentir amor o deseo por Rosario, era el tema a vencer más que una mujer que bien podría morir entre sus brazos y de esa manera arrebatar como ella lo provoco la herencia Ríos, pero ese no era el pensar de Júpiter, asesinar no era la opción a seguir ¡Definitivamente no contaba con ese corazón!A pesar que Rosario se negaba a conversar sobre la liberación de Akane y Samael, su ahora esposo Júpiter no toco el tema por dos días consecutivos, eso provocaba de cierta manera que Rosario comenzara a sentirse cómoda y no fastidiada con esa situación, mantenerla feliz y satisfecha era el principal objetivo de Júpiter.Rosario por su parte esperaba que Júpiter se comportara intenso con esa petición, pero ella comenzaba a convencerse que Júpiter en verdad

— ¿Con quién hablabas Rosario? — Le preguntó Júpiter adormitado e ignorando todo lo que ella momento atrás conversó con Melquiades.— ¡Con Melquiades mi vida! Le adelante que nuestro vuelo sale mañana y esperaba que todo se encontrara bien para nuestro regreso, aparte que tengo una sorpresa que darte.— ¿Sorpresa? ¿Por qué tendrías que darme una sorpresa? — Preguntó Júpiter con la duda en su corazón y la intriga que desde siempre permanecía en su interior.— Melquiades dejará su puesto en el centro de modas y se convertirá en nuestro mayordomo, pero aun así no lo retirare del bar, lo necesito en ese lugar si no he de manejarlo como antes.Júpiter se levantó abruptamente de la cama con la “Sorpresa” sin saber exactamente a que se debía ese cambio repentino de Rosario, por lo que abrazándola a su pecho y posteriormente impregnando un beso apasionado en sus labios, Júpiter respondió con la alegría en su rostro.— ¡Esa, si es una enorme sorpresa mi amor! Agradezco que tomaras en considera

Marlene confronto a Júpiter y específicamente retó a Rosario ante la mirada y los oídos de los periodistas, ¡Si no estaba en sus manos corregir a su hijo, entonces ella al menos trataría la manera de protegerlo!— ¡Madre por favor! No continúes con tus palabras, la última vez que me encontré contigo fui claro y creo que también me dejaste en claro que no te mancharías las manos con la fortuna de mi familia, así que no comprendo que haces aquí realmente ¿Qué pretendes con todo esto?— ¡Seguramente dinero es lo que desea mi amor! — Exclamo Rosario con egocentrismo y desprecio hacia Marlene.— Se equivoca señora, porque a comparación con usted, ¡Si tuve decencia y valor para negar lo que se me ofreció a cambio de mi silencio! Así que no venga a querer ofenderme con su propuesta de dinero. — Respondió Marlene mientras no dejaba de observar a su alrededor.Melquiades buscaba el momento adecuado para actuar y sacar a Rosario principalmente de escena y de esa manera llevarla a cualquier luga