Era una completa locura, todos se habían quedado en completo silencio, tanto André, como Dylan observaban a Elie como si no pudiese creer lo que estaba ocurriendoMientras Azriel no alejaba la mirada de la mujer, que parecía terriblemente desesperada, la verdad es que cualquiera pensaría que debido al terrible enamoramiento de Azriel Cox con aquella mujerDiría algo parecido a“no debes preocuparte, yo me haré cargo de todos modos”Pero la verdad era otra, Azriel Cox, no era un hombre honorable, mucho menos una buena persona, era algo que Elie muy dentro de ella, sabía, algo que ella esperabaÉl no por nada, era conocido como el diablo de la ciudad A, un hombre que no temía demostrar su inconformidad y acabar cualquiera si llegabas a molestarlo, pero lo cierto es que él había logrado algo que ni los Campbell, había conseguido el día de ayerEn cuanto él había tocado el suelo de la delegación, todo se había dado a su antojo, incluso había logrado ver a sus padres, ella no dudaba que le

El silencio invadía el auto que conducía Azriel, André parecía no estar dispuesto a permitir que la conversación se quedar simplemente en nadaDespués de todo, el seguía preocupado, todos los pensamientos y preocupaciones venían a su cabeza una y otra vezTodas llegando a ser peores que otras, mientras que se acercaban a la delegación de policía, André no hacía más que enumerar problemas tras problema y aquello tenía más que irritado a Azriel, quien solo hacía gestos llenos de fastidioCada que este iniciaba con otra pregunta llena de negación hacia el futuro matrimonio de este—No lo entiendo, ¿de dónde sacaste la idea un matrimonio? A penas anoche me dijiste que te gustaba, uno no se casa con quien le gusta, se casa con quien ama, con quien quiere estar para siempre ¿de dónde carajos sacaste tanta tontería?Azriel dio un gruñido y hablo, ya cansado de todo lo que este decía—Tú me diste la ideaFue entonces cuando André abría sus ojos palatinados en grande y observo a su amigo, ¿cuá

Nadie podía cree lo que veía, más cuando observaron como Elie traía consigo no solo a André Campbell, también tenía sujeto de la mano a un hombre, este era elegante y de un porte digno de admirarSus padres no podían olvidar que aquel había sido quien la había acompañado mientras estaban en la celda, pero estaban eran inmersos en sus pensamientos y todo lo que los acompañaban, que no habían prestado mayor atención a la compañía de su hijaPero ahora lo observaba de cerca, ella lo tomaba de la mano, mientras este simplemente parecía inmerso observando el hecho de que ella lo tenía sujeto de aquella formaFue entonces cuando sus ojos se centraron en unos platinados, aquellos que llenos de alegrías se acercaron a estos antes de los platinadosOlivia López no tuvo tiempo de reaccionar, este ya la había cargado en sus brazos mientras ella daba un pequeño grito y Cesar y Neo reían divertidos con la situación, nada que ver con Blair quien le decía al igual que Olivia que bajara de una buena

La mansión Campbell, como siempre se mostraba de una manera magnífica, la villa Golden era uno se los lugares exclusivos de la ciudad, mientras la Azriel observaba hacia el fondo del lugarÉl había crecido en aquel lugar, la villa de sus madres, la verdadera mansión Campbell, aquella que era conocida por ser un lugar aún más de elite que la villa de los CampbellUn lugar que en lo personal podría decirse que, de su hijo, odiaban con toda el alma, sin duda alguna un lugar tan terrible que estos solían evadir a como diera lugarPor esa razón cuando se quedó de pie observando el lugar en el fondo, una delicada mano se posó en su hombro y habló de aquella manera tan tranquila y a la vez tan llena de doble sentido que el tanto conocía—Hay lugares a los que no nos agrada para nada volver, ¿no es así?Azriel observo Abigail, ella tenía su mirada fija en la calle del fondo, con la misma oscuridad que él lo hacía, mientras se preguntaba si lo hacía directamente como él, o su mente estaba perd

—Y dale con eso de morir, ya basta madre, estoy harta de escucharlo, además del hecho de que me dices las cosas más egoístas y terribles del mundoOlivia miro un notable gesto lleno de disgusto, mientras Elie no se detenía ni por un solo segundo con sus palabras—¿Qué hay de mi corazón? Piensas en que quieres mi felicidad y no sé qué tonterías, ¿pero ¿qué hay de mí? ¿Qué hay de lo que yo deseo? ¿Qué hay de ese niño? ¿De tu nieto? ¿Y si tiene una mala vida? ¿Solo lo dejo y ya? No estoy dispuesta--¿Y si tiene una buena vida? ¿Qué harás?—Pues entonces lo dejaré avanzar y ya, solo estaré tranquila, sabré que tuvo padres maravillosos que lo aman tanto como yo quise hacerlo, sabré que valió la pena traerlo a este mundo, estar en paz por fin ¿Por qué no comprendes eso? Hablas de mi felicidad, pero no piensas en mí ni un solo segundo madre—Elie…—No… ¿Qué parte de aquel vacío no logras comprender? Dices que lo sentiste y solo me dices que deje todo tirado sin más, dices que yo te ayude a l