MARCOS no sabía cómo manejar la noticia que le acababa de dar Delfina, daba vueltas en su oficina sin saber que hacer sin saber que pensar, sabía que su hermana le había dicho la verdad, nada allí era mentira. La única hipócrita u mentirosa parecía ser Antonella, pero había que dejarle lugar a que se defendiera. Se lo preguntaría, quizás aceptara la situación o lo negara, el actuaria según la actitud que ella tomara. también pensaba que era el momento de darle una lección y hacerle entender que, con él, no podría jugar, que sería mejor que se pusiera a tomar decisiones adultas sobre su vida. Pero aun así pensó que todo aquello lo sacaba de su eje y l era un hombre que le gustaba controlar su vida, sus decisiones y las emociones que sentía por aquellos que estaban cerca de elAhora su cabeza estaba en la presentación que tenía su hermana en la filarmónica y en la reunión que tenía en la casa del gobernador. así que llamó a si madre para hacerle acuerdo.- ¡Mercedes, comunícam

Marcos y Antonella ya estaban en el sofá, se besaban y acariciaban mutuamente, perdidos en una ola de placer, sin poder reflexionar, el tiempo y el espacio desapareció para los jóvenes. En determinado momento en pleno apogeo de placer Marcos pregunta- ¿Así besabas a tu exnovio Diego? - para Antonella fue como que le echaran un pote de agua fría encima y succionara de su cuerpo de un golpe la ola de calor generada por el deseo, se detiene, intenta pararse, pero Marcos la empuja suavemente encima del Sofá mientras la continúa besando. Al mismo tiempo que pregunta- ¿Si Diego te besa como yo te beso, si es la misma sensación? -- ¡Párate, Marcos de que hablas exclama Antonella! -- ¡Tú sabes de que estoy hablando ¡- alude Marcos con un tono de voz un poco burlón. Antonella no deja esperar su reacción y pide con voz firme.- ¡Detente Marcos! - Marcos con desgano obedece a Antonella, él es un c caballero y por tanto respeta a las mujeres, si Antonella pide que se detenga se detien

Ruth trataba de calmar a su esposo, Antonella escuchaba los gritos de histeria de su padre, y estaban poniéndola nerviosa. Así que se apuró en sus aprontes para bajar y enfrentar al monstruo de su padre. Se colocó un fino vestido de mangas largas que le llegaba hasta las rodillas de color azul piedra, y salió con rapidez de su habitación.- ¡Dile a tú hija que baje inmediatamente o la voy a buscar a su habitación! -gritaba Antonio- ¡Cálmate no le hará bien a tu salud! - insistía Ruth- ¡La que me va a matar es esta mocosa, engreída y arrogante de nuestra hija! - se da vuelta y con rostro lleno de ira se vuelve a Ruth- ¡Es tu culpa que esta chiquilla se comporte así! - dice mientras camina a la sala de estar y se sirve un wiski. Sale nuevamente a la sala de entrada y mira hacía la escalera que lleva a las habitaciones del piso superior, cuando ve a Antonella bajar por ella, elegante, bella como siempre pensó, pero tan tonta como su madre, meneo la cabeza. Es que en verdad An

Marcos dejó todo arreglado en su oficina y luego recuerda que al día siguiente tiene la fiesta del gobernador en la casa de este, por tanto, debe avisarle a su madre hermana para que no lo olviden. Marca su número y llamaHola, madre como estás, es para recordarte a ti y a Delfina que mañana tenemos la invitación del gobernador a su casa, por favor no lo olviden es a las veintiuna horas, ¡bien! --Si claro hijo no preocupes ahí estaremos! - y pregunta - ¿vienes a cenar? -Marcos recuerda la cita con Clara y responde- ¡No, no me esperen disfruten por mí! - y saluda a su madre y luego corta, arregla algunas cosas en su oficina toma su portafolios y se dirige en busca de su auto.Ya conduciendo llama a Clara- ¡Estoy yendo a mi apartamento, te espero allí! -- ¡Por supuesto no me lo perdería por nada del mundo! -dice riendo Antonella está llena de odio, da vueltas en su habitación sin poder hacer nada, quiere salir, aunque sea a fumar, su padre no ha llegado todavía a la c

La fiesta en la casa del gobernador era una verdadera conmemoración, salió en la página de los principales diarios, revistas que se encargaban de las actividades de los millonarios, y en los principales canales de TV nacional. Lorenz veía uno de esos canales y pensaba los ricos con sus fiestas, ropas caras, luciendo alhajas que jamás ninguna otra persona en toda su vida podría obtener. Ella venía de una clase de gente trabajadora, estaba en pleno éxito, había comprado algunas joyas para lucir, pero nada de otro mundo. Su carrera estaba en auge pronto irían al exterior y allí iban a jugarse toda su capacidad artística y creativa. En ese momento mostraron al joven empresario Mendieta, millonario, soltero por ahora quien hablaba en ese momentoLa periodista preguntaba- ¿Dice que usted hace actos de Beneficencia señor Mendieta? - Marcos responde sonriente- ¡Si usted llama beneficencia sacar un poco del mucho dinero que la familia posee para darlo a aquellos que realmente lo nece