***NARRA GRACE*** Salimos de desayunar Nick y yo nos fuimos caminando hasta llegar a la Plaza de Armas en el centro de la ciudad, caminamos un poco con el fin de conocer un poco los alrededores. Pensábamos en conceptos para la campaña de nuestro cliente y nos regalábamos uno que otro apasionado beso que me dejaba definitivamente con ganas de más. Lo peor de todo es que pese a que sabía que en algún momento de mi vida tenía que pasar eso, tenía que perder la virginidad con alguien, al estar dos veces con Nick muy cerca de que se diera el momento, lo único que logré sentir fue miedo y mucho. Tenía que pedir un consejo a alguien, así que después de caminar un rato con Nick, fuimos al hotel a recoger algunas cosas para podernos ir a una cafetería o algún lugar a comenzar con lo que tuviéramos para lo que faltaba de la campaña.  Mientras estuve en mi habitación de hotel, decidí llamar a Priscila para saber lo del investigador y de paso pedirle un consejo, lo

***NARRA NICK***Me detuve en una esquina antes de llegar al Oxxo. Carmen no me tomó la primera llamada que le hice, mientras que la angustia y la desesperación comenzaban a causar estragos en mí. Sin darme cuenta comencé a sudar en ese preciso momento y entonces el timbre del teléfono me devolvió algo de aliento cuando ví que se trataba de Carmen.–Carmen, ¿Dónde estabas mujer? Habla Nick. Me tienes con el alma en un hilo – Dije a Carmen con impaciencia.–Joven Nicolás, si usted está con el alma en un hilo es porque, ciertamente no se puede imaginar cómo es que estoy yo – Rebatió Carmen – Supongo que ya se encuentra sólo y que es por eso que me ha devuelto la llamada.–Así es Carmen. No tengo mucho tiempo, sólo salí para comprar un cargador para Grace. Dime ahora sí, ¿Cuál es la urgencia?–Joven Nicolás, es que ha venido un sujeto de unos 35 años aproximadamente a buscarlo aquí a la empresa, tenía muy mala pinta e incluso me dio un muy buen susto. Exigió informes sobre usted y obviam

***NARRA NICK***Al entrar en mi habitación, me quedé pensando muchas cosas. Una de ellas es que no podía creer lo estúpido que había sido en decirle a Grace que acabé con Diana, por eso ella seguramente no quiso seguir con el plan para esta noche. Me puse una ropa más cómoda y decidí buscar en la carta del servicio a cuartos, para pedir algo de cenar. La verdad, a pesar de que comimos un poco tarde, me estaba muriendo de hambre.No se me antojó nada de lo del servicio a cuartos, así que salí de mi habitación y bajé al restaurante del hotel para cenar algo, tomé asiento en una mesa de las de una orilla para así poder estudiar quién entraba o quién no. En mala hora se nos atravesó ésta campaña en Saltillo estando tan cerca de Monterrey dónde todo mundo supo lo ocurrido con Diana. Una mesera me fue a llevar la carta con el menú de la cena, ordené unas flautas de pollo y una cerveza.Estaba cenando con tranquilidad cuando levanté la vista y entonces ví a Grace, quién estaba sentada en un

***NARRA NICK***Esa noche después de dejar a Grace en su habitación pude comprobar lo que yo ya sabía, ella estaba celosa y se puso aún más después de lo que Roxana dijo respecto a la relación que ella y yo habíamos tenido.Volví al restaurante con Roxana para terminar de cenar y por fin saber lo que ella se traía entre manos para venir a Saltillo, justamente los días que yo iba a estar aquí.–Pensé que no volverías Nick, pensé que te quedarías a seducir a la chiquilla esa – Se burló Roxana – Pidamos algo de beber, tengo sed y ya me terminé tu cerveza.–Está bien Roxana, pero antes de eso quiero que me digas ¿Qué estás haciendo en Saltillo? Yo no creo en las casualidades – Exigí una explicación – Tampoco creo que éste fuera el único hotel dónde pudieras hospedarte. –Nick, no seas tan amargado. El Nick que conozco, es divertido, es loco, es apasionado y es un excelente amante como le he dicho a la chiquilla esa – Divagaba Roxana – Se me hace raro que andes con alguien como ella que h

***NARRA GRACE***No quise seguir discutiendo con Nick el resto del camino rumbo a las oficinas del cliente. Sinceramente no tenía caso, lo único que si me daba mucho coraje era que él y yo habíamos estado a punto de hacer el amor dos veces, habíamos compartido varios besos y una noche y ahora llegaba esa chica Roxana a poner su cabeza a darle vueltas. Las palabras de Priscila hicieron de las suyas en mí, para recordarme que ella tenía razón. Nick era muy guapo y era obvio que esa chica siempre había sido capaz de darle lo que ciertamente yo no podía o no me había atrevido. Al diablo con Nick, pensé. Afortunadamente llegamos a tiempo con el cliente, quién ya nos esperaba en la sala de juntas de su empresa.–Hola chicos, buen día. Los estaba esperando ¿Les puedo ofrecer algo de tomar? – Preguntó el cliente muy amablemente – Tenemos café, refrescos y agua.–Buen día señor – Respondí yo – Yo sí le acepto un café, gracias.–Buen día y gracias de antemano por esperarnos – Dijo Nick – Tamb