Sin pensármelo dos veces giré mi cuerpo completamente por debajo de su mano, de forma que quedé frente a ella, eso hizo que el agarre del pelo me dolerá más pero también era la mejor forma de librarme de él. Cuando me vio de frente a ella no supo qué hacer, no se esperaba ese movimiento de mi parte. Pasé mis manos alrededor de su cuello y tirando de él hacía abajo le di un rodillazo en su abdomen que logró que me soltara mi pelo y que ella se doblara del dolor, no le di tregua, ahí mismo aproveché y con mi pierna eché la suya hacia delante provocando un desequilibrio y su caída al suelo, rápidamente me senté a ahorcajada sobre ella aprisionando sus manos con mis piernas contra su cuerpo, estaba inmovilizada. Quién diría que las clases de boxeo que tomé hace un tiempo me iban a servir para algo.Mi mente estaba como bloqueda, no veía más nada que no fuera su cara y no pensaba en nada más que en darle su merecido. Levanté mi puño y cuando me proponía propinarle el puñetazo con t

Me he quedado atónita. La miro, la vuelvo a mirar y no me lo puedo creer. Ya sabía yo que su cara me resultaba conocida de algún lado, tuve que haberme cruzado con ella miles de veces por la Universidad, por los pasillos. Esto es increíble, ¿Desde cuándo esa chica anda detrás de mí? ¿Y todo por Víctor? Pero no tiene sentido, cuando comenzaron sus ataques contra mí ya yo estaba con Apolo, Víctor y yo habíamos terminado, incluso ya él y Eyra se habían reunido como pareja amorosa. Esto no puede ser solamente un ataque de celos, no, tiene que haber algo más, si todo hubiese sido solamente por Víctor, también Eyra hubiese recibido ataques de esta chica y no fue así. ¿Qué pasa aquí? Algo se nos está pasando por alto, no nos estamos percatando de alguna cosa.Al mirarla de nuevo en su rostro se dibujó la sonrisa más malévola que jamás había visto y alzó su ceja derecha. Se tiene que haber dado cuenta que ahora era que yo sabía realmente quién era ella, vio como Eyra me lo dijo y segu

¡Cuánta felicidad Junta en un mismo lugar, cuántas personas que quiero reunidas! Esto es un subidón para mí. Pasé de estar atormentada las veinticuatro horas del día a ser muy feliz. Hacía mucho tiempo que no respiraba esta tranquilidad, siempre salía algún tema, alguna situación que me amargara el día, todo se fue dando como un bucle de malas cosas una detrás de otra, prácticamente sin darme tiempo alguno a respirar, a tomar aire y calmarme un poco, de hecho, creo que sacaré turno con algun psicólogo, siento que esto tengo que hablarlo con alguien profesional para no quedarme con rodo eso por dentro y que termine consumiéndome, no creo que eso sea bueno.Miro a mi alrededor y todo no puede estar mejor, mi familia hablando entre sí, la madre de Apolo conociendo a los míos (bueno, a mi padre, porque ahora mismo de mi madre lo que siento es vergüenza extrema, no sabría cómo explicarle a alguien esta situación y cómo de repente parece que tengo un padre, que nunca me abandonó, que t

FebreroMarzoAbril...Mayo...Junio...¡No puedo creer que ya esté de vacaciones! Bueno, en la uni porque en la empresa no hay vacaciones que valgan. Aún llevando el trabajo y los estudios a la par, logré resultados satisfactorios, justo lo que le había prometido a Apolo cuando decidí comenzar toda esta locura, y a mí misma también porque dije que no me iba a permitir en ningún momento que dejara de lado las clases y los estudios, a pesar de tener un plan especial en la Universidad, tuve que estudiar, y bastante, para los exámenes finales, pero cuando se estudia algo que se ama es tan placentero.En la empresa todo ha ido también de maravilla, dos de los borradores que he seleccionado para que les brinden atención especial serán llevados a la gran pantalla, los autores han firmado contrato y van a realizar películas de ellos, estoy tan orgullosa de mí, todavía no creo que haya sido capaz de llevar todo eso a cabo yo solita, sin tener la menor ide

Apolo llevaba más de una hora mirando las fotos que le había regalado, parecía un niño pequeño al que le dan un regalo que le encanta. Ya lo había visto del inicio al final y del final al inicio. Me preguntó el momento en que había tomado cada una de las que lo había tomado desprevenido y no se había dado cuenta- ¿Me puedes volver a decir cuándo fue esta?- Pero si ya te lo dije amor- Pero no lo recuerdo, es que son tantas que se me olvida- A ti nunca se te olvida nada, tú solo quieres que te vuelva a contar- Bueno sí, me atrapaste, es que me encanta escuchar por ti la historia -sí, definitivamente era un niño pequeño- Fue cuando me llevaste a tu segunda casa, la primera mañana que pasamos ahí yo desperté y tú estabas parado en el balcón con la bata de baño puesta y tenía