01/05/2018.Naobi. Después de la encerrona que perpetró el diablo Preston, nada podía quitarme la sonrisa de la boca, ni siquiera la cara de superioridad de la dependienta de la tienda de ropa, a la que tuve que ir por un cambio limpio, ya que, no podía solo aparecer con el vestido del sábado en casa del tío John. Scott, es un hombre excepcional, no le importa que esté incompleta como mujer, incluso estando a su lado, no me siento rota y dañada, me siento la mujer más feliz del mundo.Antes de salir de su casa le dije a Scott, que debía despedirme hoy de mi hermano, su vuelo sale a las diez y veinte de la mañana, por lo que estoy contra reloj ahora, mientras la chica Starla, según su placa identificativa, está demorando horas para cobrarme.El sonido de mi teléfono celular me detiene de pedir un taxi pa

Una vez de vuelta a la mesa, ya calmado, Naobi, es la primera en hablar.—Me gustaría decir algo antes de que cualquiera de los dos vuelva a intentar entenderse. Sé que ambos tienen mucho que decirse y me gustaría ambos traten de ponerse en los zapatos de otro, es la única manera de lograr una comunicación efectiva, y sobre todo se comprometan a escuchar con el corazón y no solo con sus oídos. Hay muchos años de dolor y errores, pero si ambos quieren liberarse del rencor y el sufrimiento, deben hacer esto dispuestos y con el corazón en la mano, de nada sirve estar aquí sin intentar ser mejores aún y cuando no se pueda llegar a entablar una relación estrecha entre ustedes como nieto y abuelo, que por lo menos sea cordial.—Estoy de acuerdo con usted señorita Summers. —su tono se escucha ahogado como con lágrimas reprimidas, ¿podría ser? &ique

 Un rato despues... Esta visita está resultando bastante entretenida. De aquí salimos de regreso a la carretera. Jonathan, condujo una media hora al noroeste, según me explican, para llegar a los viñedos Peach Creek Vineyards, ubicados a pocos kilómetros al sur de College Station. Mientras nos comemos el asfalto me entero de que Jonathan y Jins, se dedican a esto de los vinos en su negocio personal, tienen un pequeño restaurant de tapas, que atienden ellos mismo, éste recorrido lo hacen cada cierto tiempo para comprar nuevos vinos y abastecer su negocio.Llegamos rápido y tuvimos que esperar al grupo que nos acompañó anterioridad.Como las veces anteriores un empleado nos atiende y nos cuenta sobre las bodegas:—Fundados por Ken y Donna Stolpman, los viñedos Peach Creek, se extienden por cinco acres. Por aquí tenemos una sa

08/05/2018.Naobi.El día de la operación llega demasiado rápido, y después de la escena de ayer con Tamara Larson, mis nervios están de puntas y mi estómago protesta con boicotear cada intento de alimentarme. Sé que Scott, no sería capaz de prestarse para su juego, sin embargo, ella es una mujer curtida en estos y casi todos los juegos, confía cien por ciento en ganar todo lo que se proponga. Es una mujer que donde pone el ojo pone la bala y sé que esa bala va dirigida a mí.Ayer en la noche me quedé a hacerle compañía a Scott, y tratar de calmar sus miedos y pesadillas, no fue nada fácil, se vuelve un bebé quisquilloso y malhumorado. Pero es hoy que estamos a punto de entrar a la consulta para luego realizar la operación, es cuando mis pesadillas y temores me atacan.Revivir la angustia por la que pas&

Intento cerrar la puerta del baño no sin antes ser educado:—Gracias, así está bien. —Tranco antes de que la enfermera se cuele y quiera bajarme los pantalones como su forma de ayuda.Termino de atender el llamado de la naturaleza y tomar el bolso que dejo mi tía antes de irse sobre la encimera para asearme un poco. Una vez terminado con todo, salgo y regreso a la cama con ayuda de la enfermera, tocan de nuevo a la puerta.—¿Puedo pasar Scott? —es la voz de Charles, quien pregunta.—Sí, Charles, pasa —termino de acomodarme en la cama, la enfermera se despide y promete volver luego con Leonard.—Me he enterado de lo que pasó con la señorita Summers, y me gustaría ofrecerte mi ayuda —su voz suena algo apenada—. Quizás esto te parezca un poco raro… yo, bueno mande a investigar con anterioridad a la señorita, si me a