a veces vivir la vida duele tanto y más si te tienes que          dar cuenta de que la vida es mucho más difícil de lo que uno se imaginaba.        - me imagino que es del jardinero - habla con tanto veneno, pero asiento porque es verdad - ¿quién más podría ser? - me pregunta - lo más curioso de todo es que tuviste la oportunidad de conocer a muchos hombres, hombres prestigiosos por todo el mundo, llenos de dinero y con Buenos apellidos, pero aun Asi decides meterte con el jardinero que nunca ha salido de este miserable pueblo- suelta con enojo- tuve que haber hecho algo muy malo en esta vida para que este sea el resultado. mi hija, la hija por la que yo he dado toda mi vida enamorada del jardinero que no curso ni segundo de colegio- afirma y yo ruedo los ojos- me esforcé porque fueras un

- el dinero aún no lo tengo pero en cuanto lo tenga se lo voy a regresar lo juro- afirmo entre dientes- y respecto a lo otro que dijo , usted nos está acusando de algo muy grave y si usted tiene las pruebas de esas cosas entonces le suplico que las muestre- le digo y va a decir algo y lo corto- mientras que no la tenga ahora mismo en sus manos entonces es mejor que no lo mencione- le digo con seriedad y prepotencia porque no estoy dispuesta a dejar que él nos humille y mucho menos que humille a mi madre de esa manera porque de mí no tiene nada que decir.   - lo necesito lo más pronto posible, le doy un día para que me lo devuelva - me dice con seriedad - siendo así me retiro - me dice ignorando lo último que me dijo - hay otra cosa que necesito hablar contigo - le digo con seriedad - y necesito que por favor me escuche - trato de hablar lo más tranquila posible, como si eso fuera posible pe

Déjame tomarte de la mano mi madre me ve tirada en el piso como un trapo viejo y aun Asi no dice nada- ¿es así como me quieres ver?- le pregunto - humillada por un hombre - le digo muy dolida porque estoy tan molesta con ella, hubiera preferido vivir en la pobreza que tener que aguantarnos todas estas cosas, no es justo que la vida sea así de dura y cruel cuando yo no he hecho nada malo nunca para merecer esto - ¿te llena de satisfacción verme así?- le pregunto - porque no lo entiendo como una madre puede arrojar a su "preciada" hija a los brazos de un ser tan despreciable como ese- le digo y solo me mira fijamente pero a la vez es como si no siquiera me estuviera viendo, su mirada se ve tan vacía - ¿viste cómo me hablo? ¿vistes la manera tan despreciable a la que se refiero a ti? - le pregunto y no dice nada- y piensas que yo debo aceptar casarme con ese hombre solo

- ¿y? - le pregunto - eso no tiene nada que ver con nosotros y tampoco nos debe importar lo que ese malnacido pueda decir, lo único que debemos hacer es seguir con la cabeza en alto - que es un conde y es normal que te trate así. No conoce otro trato, él es superior a nosotros- me asegura- porque el pose un título que nosotros no tenemos y si contamos con suerte él pueda que quiera casarse contigo y tú serás una condesa, piensa en el lugar que eso nos podría, seriamos quien manejaría todo- afirma-  el Conde Hector es lo mejor que nos podría suceder, es uno de los apoderados más cercanos a los reyes de Inglaterra hasta dicen que la reina lo puede nombrar Rey - asegura y yo niego con la cabeza, yo sé que eso es muy cierto porque en unos de mis viajes ese se rumoraba mucho en Londres y  según lo que me dijo una amiga que ahora es novia de uno de los sobrinos de los r

- ya déjame - le digo enojada - y vete de mi habitación- le digo furiosa porque ahora no quiero verla ni mucho menos escucharla.  - tu y yo vamos a hablar muy seriamente- me dice con enojo y yo niego  - madre no quiero discutir así que te voy a pedir el favor que de mi habitación en este momento - le digo con seriedad    - si vuelvo a ver a ese tipo cerca de mi te juro que hablare con el Conde y te aseguro que el sí hara algo al respecto- me advierte - no hace falta que le digas nada a tu querido conde porque estoy segura que él no va a querer acercarse más a mi - hablo con tristeza - así que hazme el favor de salir de mi habitación- le pido una vez más perdiendo la paciencia  sale de habitación furiosa y yo cierro la puerta con seguro mientras me dejo caer en el piso con enojo y frustración yo no me quiero casar, pero tengo que hacerlo.  no tengo una opción diferente  Respiro