No podia creer ni entender lo que el estaba diciendo. Toda mi vida habia sido una mujer insegura. Nunca me habia creído que podia valer tanto para alguien o simplemente tener una relación así. Alex Cooper me habia confesado su amor y yo, simplemente me habia quedado parada, sin decir absolutamente nada. -Eva, ¿puedes decir algo?- susurro a la vez que se acercaba a mi. Me lo quede observando buscando algun indicio de una broma o si simplemente queria escuchar mi respuesta. El se veía hermoso, reluciente,  pero su rostro mostraba horror y panico.-Yo, no se que decir. - murmure nerviosa y en ese momento quise llorar.-¿qje quieres decir ?- pregunto Alex con sus sentidos alertas y una cara de perro malo que conocia.-me gustas Alex, me gustas mucho. Me gusta pasar tiempo contigo y me gusta los momentos que me dedicas. Al mismo tiempo siento que vas a lastimarme y vas a dejarme tirada como basu

al cerrar la puerta de la habitacion escuche como la voz de Alex sonaba en el baño, habia pronunciado mi nombre. Haciendo caso omiso salí lo mas rapido que pude de la casa y camine hacia la puerta de salida. El lugar tenia un largo camino de flores y plantas. Era todo hermoso, parecido a esas peliculas en donde el jardin es soñado. Debia realizar unos 100 metros de jardin para llegar a ello. No me importaba en absoluto no saber donde estaba yendo. El me habia mentido, era un estupido y yo me sentia engañada. Quizas todo el mundo en este lugar sabia que el vivia con una mujer aqui. -EVA QUE HACES.- escuche los gritos detras de mi, cada vez estaban mas cerca. No iba a quedarme callada, quien se creía que era. Algo que siempre me habia enseñado mi madre era a respetarme a mi misma, ella siempre decia que si un hombre no te respetaba a la primera, no lo iba a hacer nunca. ¿Que pensaba el?compratme un armario &nbs

Me desperte al sentir el estomago revuelto y me movi rapidamente saliendo de debajo de Alex. Lo que me costo un poco ya que el se encontraba totalmente desmayado encima de mi. Me encerre en el baño y vomite todo lo que mi estomago tenia dentro. Realmente no se si vomitaba por nervios o por algo mas. Me carcomia la culpa pensar lo irresponsable que había sido. Cuantas veces habia perdido la consciencia por estar en sus brazos y ahora debia pagarlo. Luego de lavar mis dientes salí de la habitación. Era domingo, le mande un mensaje a la ginecóloga y me respondio que me esperaba mañana a las 8:30 am. No sabia que decir, que hacer, solo iba a esperar. Por un momento pense en irme y comprar un evatest, pero el hecho de que me vaya iba a hacer que Alex se ponga loco nuevamente. Sin decir nada baje a su cocina, todo en el era pulcro,  increible. Su heladera contaba con viandas de comida con nombre, al parecer su cocinera era muy bien organizada

Luego de llorar por media hora más, Alice me llevo hacia la empresa. Si faltaba Alex iba a preguntarme que sucedió. Colocando corrector de ojeras mire a mi mejor amiga que se encontraba en el asiento del conductor. Ella tanto como yo traía los ojos hinchados de tanto llorar. Nunca me habia imaginado que a los 23 años iba a estar esperando un bebé. Abrazando una vez mas a Alice,  ella me sonrió.-Tranquila amiga, no estas sola. La tia Alice va a estar siempre.-yo quise llorar nuevamente y asintiendo hacia ella me separe. -Te llamo luego- ella asintio hacia mi y yo me baje del auto.Entre en la empresa, todo el mundo iba y venía cumpliendo con sus roles de trabajo. La empresa de Alex era una de las primeras mundialmente y todo el mundo visitaba este lugar... cuando para todos era un día mas, hoy mi vida había cambiado. Estaba embarazada, estaba esperando un hijo de mi jefe, de un hombre que

Esa noche había sido una noche soñada,  no por haber tenido sexo, no habíamos tenido sexo en lo absoluto. Simplemente habíamos estado durmiendo, abrazos, el uno al otro. El saber que yo estaba para el y el para mi, esa sensación hacía que mi corazón quisiera salirse de su lugar. Amaba sentir sus brazos sobre mi cuerpo, oír su respiración al dormir, sus caricias dormitando y su amor incondicional. No siempre encontramos a la persona ideal, la persona que nos hace sentir libres y seguros.  Yo en estos momentos me sentia asi, asi era como quería pasar el resto de mis dias y mis noches. Con el. Todo fue mágico hasta que mis ojos se abrieron. La cama estaba vacia y todo se sentía frio. Asimilado mi realidad,  oobserve somnolienta que Alex no estaba a mi lado.  Estaba en su habitación,  en su zona de confort. Estudiando el lugar mi corazón salto al ver qu