CAPITULO 74 TE AMO.
Valerie Ghill.
─ El señor Franchesco se retiró y los invitados que quedaban se despidieron, ─ mencionó uno del personal contratado y yo, solo asentí.
─ Tomen sus cosas, ya se pueden retirar. Mañana se ordenará todo para dejarlo como estaba, ─ les informé, volví a ingresar a la mansión, tomé mis cosas de la habitación asignada y salí apresurada de ee lugar.
En el camino, solo iba pensando en lo sucedido, en lo caliente que todavía estaba.
Llegué a mi casa, todo estaba silencioso y oscuro, subí hasta mi habitación, entré con cuidado para no despertar a Samuel, para mí sorpresa la habitación se iluminó y...
Observé mi cama vacía. Samuel, estaba en una esquina de la habitación, se notaba furioso, quizás era por las llamadas y mensajes no respondidos, me dio igual, dándole una pequeña explicación que en realidad no se merecía.
Él, se quedó observándome de pies a cabeza sorprendido, recordé las palabras de Franchesco, sobre lo de parecer una diosa y como tal me comporté, desvistiéndome a