Cole se encogió de hombros hacia ella, señalando que no tenía nada que ver con esto.

Spencer no había visto a la Señora Yorks durante mucho tiempo. Ahora que estaban reunidos, notó lo mucho más delgada que se había puesto ella y también ese temperamento tranquilo de ella después de independizarse. Spencer estaba un poco deslumbrado por ella.

Entre todas sus mujeres, la belleza, el conocimiento y el temperamento de la Señora Yorks eran cosas que las demás no tenían.

La Tía Sandra se molestó cuando vio a Spencer mirando a la Señora Yorks con tanto afecto. Comenzó a burlarse de ella, diciendo: “Oh, ha pasado bastante tiempo, Hermana Crystal. Te has vuelto mucho más delgada. Supongo que la vida fuera de la Fortaleza Yorks no te ha tratado bien. Es mejor si vuelves”.

Esta era una táctica estándar de ella, un cumplido disfrazado.

La Señora Yorks respondió con arrogancia: “Me volví mucho más delgada. Pero eso es solo porque me he visto abrumada por cuidar de Shirley. También tengo que ay