— ¿Así que no pueden dormir? ¿Ustedes tienen idea de que hora es ya? — Preguntó Alexander viendo seriamente a los pequeños mellizos en sus cunas.
Maggie quien estaba sentada y llorosa le veía fijamente, en cuanto a Michael quien estaba de pie en su propia cuna, extendió sus brazos hacia él para que le sacara de ahí.
— ¡Ale! — Le llamó el niño agitando sus bracitos para que le alzara.
Alexander se acercó a su hijo y se inclinó hacia él, viéndolo seriamente.
"¿Ale? En el parque de diversiones no dejaba de decirme solamente: Hey"
"Supongo que ya avance, ahora al menos acorta mi nombre"
Pensó él sacando al niño de la cuna.
"¿Qué los habrá despertado?"
Pensó ese hombre perfectamente vestido viendo los alrededores y haciendo una expresión de disgusto.
— Bueno… Yo tampoco podría dormir en una habitación tan fea como esta, ahora que la veo mejor. Los entiendo. — Comentó él para si mismo. — La enviaré a remodelar, aunque tu terca madre no quiera aceptar nada de mí para ustedes.
— ¡