—No seas maleducado Andrew. Él es mi invitado. Vino conmigo — le comunico para que se controle.
—Él es tu jefe. No tiene que ir contigo a ninguna parte — impone molesto apenas aguantándose.
Ruego mis ojos, y le pasó por el lado por esta escena.
—No seas ridículo, contrólate — le susurro cuando pa